miércoles, 9 de septiembre de 2015

Dos motu proprio de aperitivo

Los motu proprio 'Mitis Iudex Dominus Iesus' et 'Mitis et misericors Iesus', además de ser lo que son, ¿son algo más? Yes of course: Son el aperitivo para el Sínodo, la señal para que los PP. Sinodales entiendan qué se espera de ellos y en qué sentido deben encauzar sus exposiciones, deliberaciones y conclusiones.

También pudieran entenderse como el preámbulo admonitorio de lo que al fin sucederá: Desde el Sumo Solio se resolverá, motu proprio, el nudo gordiano sinodal, si se trabase el asunto.

Entiéndase - y entiendan todos - que la voluntad resolutiva, simplificante, lenitiva de PP Franciscus se aviene mal con el sostenella y no enmendalla que, desde la óptica kasperita, parece ser el mote emblemático de los irreductibles.

Conque los motu proprio date, son un aviso, un alto aviso.

Y tonto el que no lo vea.

Por otra parte, dada la idiosincrasia de personas y lugares, siendo el tema anulatorio-matrimonial tan poliédricamente rico en circunstancias e intereses, supuestos los tejemanejes perpetrados cuando imperaban el rigor y la severidad y las cautelas de eximios tribunales, horripila imaginar los pasteleos y enjuagues que puedan ocurrir cuando, a partir de ahora, se aflojen las trabas y todo quede, sub specie collegialitatis, en manos de obispos y curias diocesanas...estando como están los prelados hodiernos y sus curias atque curiales.

¡Qué miedo!

Si quieren quemar en la hoguera de la modernidad la indisolubilidad que tanto les molesta, lo están haciendo muy bien: Un motu proprio en latín no suena a golpe revolucionario, aunque lo pueda ser.


+T.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Che avesse manie di comando lo avevamo capito, in Italia si dice : dire a nuora perché suocera intenda, ma la foto postata oggi, che ritrae questo vescovo di Roma che si inchina e nasconde la croce pettorale davanti alla first lady israeliana, per non offendere le sue credenze religiose, fa male al cuore.....forse ci meritiamo questo uomo perché non abbiamo più il coraggio di mostrarci cristiani in primis, cattolici in seguito, ma siamo senza Pietro e Paolo è andato in ritiro spirituale, che Dio abbia pietà di noi.

Curro Estévez dijo...

Hay que reconocer que la jugada es maestra.
Días antes se concede a los lefebrianos la gracia de confesar/absolver válidamente,
y los tradis, agradecidos y encantados.
Nos tiene a todos neutralizados.
El "misericordioso" es muy astuto.

Juan Antonio dijo...

El punto doliente es el que Ud., páter, apunta en la entrada de hoy. Porque en multitud de diócesis de determinados lugares (Alemania, Austria y Suiza especialmente; pero en muchos otros países también) las nuevas disposiciones se traducirán de facto en un divorcio católico, por mucho que la doctrina permanezca intacta en la vitrina. Es la naturaleza caída en acción: donde debería haber sumo cuidado y exquisito discernimiento, la pereza (o todavía peor, la ideología) vencerá y se impondrán el trámite exprés, la opinión sumaria y el comodísimo expediente de la "misericordia".

¡Valiente "misericordia farisaica", que propicia la injusticia que clama al cielo! Conozco yo un caso de una familia bien barcelonesa, en la que un buen día el marido, supernumerario de cierta prelatura, decide dejar a la mujer e irse con otra. Con cinco o seis hijos a las espaldas. Y como tiene posibles y sus padres tienen contactos se paga un buen abogado, y consigue un espléndido dictamen pericial de un psiquiatra, miembro también de su instituto (un auténtico sinvergüenza, por ahorrar calificativos); en el que se certifica "más allá de toda duda razonable" la inmadurez del doncel. Y con eso se va a la Rota, porque como "buenos cristianos" él y sus padres tienen escrúpulos de conciencia por lo que está a punto de hacer y necesitan todos ellos un sellico oficial para mostrarlo a sus respectivos círculos de amistades (nunca mejor dicho). Y por ahí sigue la causa, con la pobre esposa hecha migas y un cortejo de churumbeles a las espaldas. No me cabe duda de que con la nueva reforma el asunto se habría ya resuelto "misericordiosament i amb seny" en la sede metropolitana sin mayor dificultad. Y cuando digo "misericordiosamente" quiero decir en sentido no precisamente favorable a la sufrida mujer.

¿Que el Papa tiene potestad de hacer lo que ha hecho, como repiten los piadosos papólatras, agarrando -como de costumbre- el rábano por las hojas? ¡Pues por supuesto, faltaría más! Y también podría haber atribuido competencia para conocer de las causas de nulidad al párroco de los cónyuges, al Dalai Lama o a la kioskera de la esquina, y el matrimonio en teoría seguiría siendo indisoluble y aquí no habría pasado nada. Seamos serios...

Y luego está la soberana mentecatez esa de que "el 90% de los matrimonios que se contraen hoy día son nulos". Un tópico de barra de bar, que no resiste el más mínimo escrutinio racional, convertido en motor de la reforma canónica. Y que en el hipotético caso de que fuera cierto necesitaría medidas que fuesen a la raíz del problema, no parches para facilitar el "si te he visto no me acuerdo".

En fin, perdón una vez más por el exabrupto y por lo largo del comentario. En adelante trataré de ser más breve.


Anónimo dijo...

El tema de la cantidad de matrimonios de hoy día que nacen imperfectos por mala disposicion, preparacion, falta de fé, restos de convencionalismo social... etc... de los contrayentes me parece que no es menor.

A vuelopajaro leo el CDC y me parece que hay muchas cosas que hoy día faltan.

Cuando tenga tiempo y si lo encuentro online leeré algun CDC comentado para estudiar el asunto.

Juancho.

Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...
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Anónimo dijo...

Gaillot le contó al -----(bergoglio) que en una ocasión bendijo a una pareja homosexual. “------(el falsario) escuchó, porque está abierto a todo eso, y me recordó que bendecir es decir el bien de Dios a las personas. “Continúe, lo que Ud. hace está bien”

En diciembre de 1988,Gaillot,siendo obispo de Evreux, dió una entrevista a la revista erótica Lui,y unos días después dijo por radio que estaba dispuesto a bendecir las uniones de homosexuales que se lo pidiesen.

El 2 de febrero de 1989 escribió un artículo para el semanario Gai Pied,con el título “Ser homosexual y católico”, y desde 2013 publica en Huffington Post escritos a favor de la eutanasia y del matrimonio homosexual”


http://www.catapulta.com.ar/archivos/15340
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en el 88 ya andaban haciendo sus "cositas" los obispetes
para los que niegan la realidad de que esto VIENE DE LEJOS