martes, 28 de junio de 2011

Joven promesa


Como el desnorte es grande y los desvaríos múltiples, los desatinos se han vuelto el pan con lágrimas de cada día. Y el muestrario es universal, con episodios ejemplares en el villorrio de al lado y en la punta de la Cochinchina, por todos sitios.

En nuestra España, no sé a qué cráneo privilegiado le ha dado por 'apostar' (temible pseudo-concepto, si grave en política más funesto todavía en religión) por prelados jóvenes, de apenas dos lustros de experiencia pastoral. Hay ya varios de esta, digamos, talla. Si resultan buenos y validan la 'apuesta', demos gracias a Dios. Pero como salgan petardos, o mediocres, que Dios tenga misericordia de los pobres que tengan que aguantar a semejantes.

Del bisoño prelado de Solsona apenas sé lo que ha aparecido en los medios. pero lo que en los medios ha salido me eriza el vellón del cogote. Primero fueron unas fotos que corren por ahí, del día de su ordenación episcopal. Digamos que son entre chic y naif, instantáneas que captan je ne se quoi que te dejan no sabiendo toda ciencia trascendiendo. Inefables impresiones, dejémoslo ahí.

Pero luego hay más. Por ejemplo esta entrevista publicada en ABC la semana pasada, con el mitrado solsonés hablando de sexualidad, que es - como todo el mundo sabe - un tema de conversación muy adecuado para un obispo de Solsona (o de Pekín). Yo, que en concepto episcopal soy sanamente ultramontano, no me imagino al obispo ideal que tengo en mente diciendo que:

"...Hay una pulsión en el género humano, el deseo sexual, que si uno no lo humaniza pues es fácil que empiece por el derrotero de intentar descubrir qué es el placer venéreo, el placer sexual, y que le sepa a poco porque, en el fondo, el placer sexual, cuando no va unido al amor verdadero, siempre deja como vacío"

Es que - me dirán - los tiempos han cambiado. ¿Es que - pregunto yo - los obispos han cambiado con los tiempos? ¿Y los pecados, también han cambiado? ¿Y las virtudes? Si me dicen que justamente por eso dice el obispo Novell lo que dice, por los tiempos, por los cambios, yo no me quedo satisfecho con la respuesta, al contrario.

Me quedo con el interrogante de por qué en un mundo híper-sexualizado un obispo junior tiene que hablar de lo mismo en dialecto neo-episcopal pretendiendo hacer malabarismos en la cuerda floja de la exposición, con la consabida reiteración del concepto 'amor', con variaciones idealizadas y una ausencia quasi absoluta del concepto 'virtud' (que al caso requeriría pronunciar palabras/contenidos como castidad, pureza, continencia, pudor, etc.).

El resto de lo que dice es una secuencia de antropologismo teológico juanpablista, muy de moda. Discurso que en boca de un estudiante del Laterano puede disculparse, porque es lo que hay. Pero dicho en boca de un obispo (aunque sea un obispo jr.) desazona bastante.

Pero aun me faltaba por ver el youtube que una conocida web incluyó al lado de la entrevista, supongo que para mejor ilustrar al obispo junior Novell:



¿Puede un obispo (aunque sea clase jr.) alternar en un programa donde se escarnece, ridiculiza, injuria y satiriza a la Iglesia contínuamente? ¿Es honroso para un obispo (no obstante la categoría jr.) aparecer en un programa de tv como ese?

Claro que existen malos ejemplos previos. Recuerdo las entrevistas al Cardenal Fray Amigo Vallejo, en un programa de varietés en el que delante del cardenal entrevistaban a un travesti-drag-queen y después del Cardenal seguía la entrevista a un cantante de rap-macarra-porrero. Muy fraternal todo, de muy buen tono franciscano-buenagente-to er mundo é güeno.

¿Los frutos de todo esto? Lo ignoro. Imagino que el locuaz prelado Novell (ep. jr.) los recogerá. Con todos los años que se le auguran a su prometedor curriculum podrá cosechar los frutos que den esas entrevistas, tan divertidas.

Conste que no pongo en duda su buena intención. Aunque reconozco que dudo mucho de sus resultados.

¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los cardos? Mt 7, 16

p.s. Se me olvidaba: El comentario sobre el clero ortodoxo, es de lo más cutre, ofensivo y despreciativo que he leído nunca. Si así piensa y a esas fuentes de información se atiene, el mitrado Novell, obispo mocito, tiene mucho que prosperar en prudencia, discreción y eso que los oficialistas de la CEE llaman en sus papeles 'caridad pastoral'. Espero que le hayan dado un buen tirón de orejas, porque tal descalificación merece un excelentísimo rapapolvos. Por no hablar de ecumenismo. Y tampoco de prejucios xenófobos. Desde la frontera catalana, precisamente.


+T.