lunes, 1 de agosto de 2016

Imagen y sonido


Mis reticencias a las jmj no son de ahora, ya me irritaban desde las primeras, las juanpablistas. Tampoco me gustan los 'conciertos' rock, algo que - mutatis mutandis - se les parece tanto. Abomino de los multitudinarismos religiosos. Soy católico creyente y no soporto todo eso que se hacen en estas ocasiones, en las que siempre se cometen abusos (por no decir profanaciones). Yo lo he presenciado. Desgraciadamente, otros muchos también me lo han contado. Pero lo peor es que la mayoría de los que están son absolutamente inconscientes, los obispos a la cabeza del grupo general de la inconsciencia.

Por ejemplo, miren Uds. y saquen conclusiones de la foto que he puesto de cabecera. Son los obispos y prelados concelebrantes en la mega-Misa de clausura de la JMJ, esta mañana, en Cracovia. Ya revestidos, a la espera de que llegue PP Franciscus y comience la Santa Misa, parlotean entre ellos, distendida e informalmente, mientras en la pantalla del fondo proyectan la imagen de tres rockeros guitarreando y cantando yo-no-se-qué. Ese era el 'ambiente jerárquico'. El de los jóvenes participantes, si lo imaginamos correspondientemente, mejor no figurárselo.

Para cerrar el álbum, la agencia Romereports nos ilustra con el detalle de la despedida:

Mientras cumple con el protocolo oficial de despedida del clero y autoridades polacas, una banda toca el 'We are the Champions' del grupo rockero Queen:





No hace falta que nadie me diga que en las jmj, y en esta de Cracovia en particular, hay verdadero fervor y auténtica devoción. Me lo creo. No discuto porcentajes. Si por 10 justos se salvaba (que no se salvó) Sodoma, supongo que por un puñadito de buenos jóvenes católicos de todo el mundo se podría justificar una jmj.

Pues eso. No digamos más.

+T.