Noche oscura, noche oscura,
profundo, insondable el cielo;
cuanto más cierra la noche
más reluce aquel Lucero:
¡Dios nacido sobre el heno!
Noche fría, noche fría,
cortante el aire cual hielo;
mientras más la noche enfría
más arde de amor su Fuego:
¡Dios nacido en este suelo!
Noche queda, noche queda,
recogida y en silencio;
cuanto más calla la noche,
más resuena su Evangelio:
¡Nos nació Dios Verdadero!
+T.