viernes, 30 de agosto de 2013

Un parto de los montes?

 
Si lo que son más que rumores se confirma, mañana se hará público el nombramiento del nuevo Secretario de Estado, un cinquentenne, diplomático vaticano de carrera, Mons. Pietro Parolin, con un clasicísimo cursus honorum en su haber, un currículum típico en un prelado de carrera al servicio de la Santa Sede.

En VaticanInsider le dedican un artículo quasi hagiográfico, todo elogios. En otro sitio dejan caer que lo mandaron de nuncio a Venezuela para quitarlo de Roma, para evitarle contaminaciones, dado el estado de la atmósfera en la Urbe. También se dice que se desconoce quién sea su mentor, la mano prudente que ha auspiciado su trayectoria.

Para los que esperaban de PP Franciscus un nombramiento 'rompedor', el final de la expectación creada se ha resuelto de la manera más prudente, incluso tradicional: Un italiano formado en la Academia Diplomática, con encargos que le vinculan a los más conspicuos personajes vaticanos de estos últimos lustros, con bien probada experiencia curial.

Sin duda, es un nombramiento prudente, muy ponderado. Algunos dirán que nada nuevo, que más de lo mismo para lo mismo. Sin embargo, dado el carácter resuelto e independiente que caracteriza - hasta ahora - a PP Franciscus no se puede decir aun en qué términos se regulará la relación del Papa con su Secretario de Estado.

Ha habido caso de secretarios que han sido un sólo corazón con 'su' Papa, el más memorable el de Merry del Val con Pio X, un verdadero 'tandem' (también en santidad). El Cardenal Rafael Merry del Val era joven, más joven que Parolin, cuando asumió las labores de la Secretaría de Estado del Papa Sarto. Merry era un curial y diplomático, con experiencia de 'mundo eclesiástico', que complementó admirablemente la sabia sencillez de Pio Décimo, quien supo calibrar muy bien las cualidades de su electo.

El gran Pio XII, tan consciente y responsable de su ministerio, después de la muerte del Cardenal Maglione, su Secretario de Estado entre 1939-1944, al decidir asumir personalmente las funciones de la Secretaría, escogio a los jóvenes monseñores Tardini y Montini como auxiliares inmediatos, con la explícita consideración de que no quería colaboradores, sino ejecutores.

¿Será Parolin el complemento ideal de PP Franciscus? ¿Un cooperador o un ejecutor?

Lo peor sería que se repitieran historias, con capítulos ya conocidos.

Sinceramente, le encomiendo. Para que sirva bien a la Iglesia y al Papa.

Los tiempos y las circunstancias no admitirían fallos.


+T.