Traducción al español:
A medida que se acerca el aniversario de Traditions Custodes, aumenta la exasperación…
RIPOSTE CATHOLIQUE 13 DE JULIO DE 2022
El 16 de julio de 2022 se cumplirá un año desde que el Motu proprio Traditionis Custodes habrá establecido una categoría de católicos de segunda clase en la Iglesia. Privados, fuera de la Misa, de los sacramentos celebrados en la forma que les procura su bien espiritual, privados de las celebraciones parroquiales, privados incluso de la mención de su existencia en los boletines parroquiales, tal es la suerte de los católicos apegados a la liturgia tradicional.
En el mismo período, la Iglesia nunca habrá proclamado tanto que es, según el Papa, una Iglesia en la que " todos participan, nadie en el lugar de los demás ni por encima de los demás ". Su nueva forma debe ser sinodal, es decir " una Iglesia sin cadenas y sin muros, en la que todos puedan sentirse acogidos y acompañados, en la que el arte de la escucha, del diálogo, de la participación, bajo la autoridad única del Espíritu Santo . (Papa Francisco, 29 de junio de 2022).
Desgraciadamente, desde la Traditionis Custodes, esta Iglesia resulta ser también la de la exclusión, del rechazo, del absolutismo. A pesar de la aberración que representa un régimen de restricción eclesial respecto de los fieles apegados a la tradición, y salvo algunas benévolas excepciones, los Obispos no han considerado útil asumir la defensa de esta porción del rebaño que les ha sido encomendada.
Según los ecos que nos llegan de diversas diócesis, la aplicación de la Traditionis Custodes se hace según el método de la “estrangulación progresiva”. En Var, se suprime la misa tradicional celebrada el domingo por la noche en la catedral de Toulon. En la diócesis de Belley-Ars, el obispo Roland prohibió cualquier misa tridentina en la basílica de Ars en presencia de los fieles. En Orange, los fieles descubren que los horarios de Misa para su comunidad han sido eliminados del boletín parroquial. En la diócesis de Grenoble desde finales de 2021, y en la de Le Mans desde junio de 2022, dos obispos han suprimido por un acto administrativo la mayoría de los sacramentos de los que se beneficiaban los fieles tradicionales, y esto justo antes de dejar su sede episcopal por un nueva tarea.
Esta estrategia de tierra arrasada, que consiste en violar la conciencia de los fieles apegados a la tradición sin consideración de lo que los santifica, es la manifestación de un desprecio increíble por parte de quienes deberían ser padres. “ Vosotros que sois malos , nos dice Cristo, si vuestro hijo os pide un pescado, ¿le daréis una serpiente? (San Mateo, 7,10). Si Cristo tiene razón al llamarnos malos, porque lo somos desde la culpa de Adán, ¿cómo llamará a los que, a sabiendas, nos dan una piedra cuando les pedimos pan?
Estas acciones conducen inevitablemente a la exasperación. La voz de los sin voz en la Iglesia ya no podrá permanecer en silencio. ¿Seremos escuchados en esta “ Iglesia sinodal: un lugar abierto donde todos se sientan como en casa y puedan participar ”? Para los fieles apegados a la Tradición, ha llegado el momento de ser escuchados.
+T.