Hace unos días, casualmente, buscando otra cosa, me encontré con una curiosa semblanza, una anécdota, encuadrada en los años en que la reforma litúrgica del Vaticano II suscitaba pasiones, en la Roma montiniana de fines de los '60.
El artículo aparece en una página de la Provincia Romana de la Congregación de la Misión (misioneros de S. Vicente de Paul, pp. lazaristas o paúles), describiendo su sede actual, la iglesia de San Silvestre en el Quirinal y la casa-residencia aneja.
La Iglesia de San Silvestro al Quirinale es una de esas iglesitas romanas que, si no sabes dónde se encuentra, puedes pasar delante de ella, sin advertirla. Su portada está alineada entre las fachadas de la acera izquierda de la calle 24 de Mayo, subiendo desde Largo Magnanápoli, en dirección al Palacio del Quirinal. La iglesia es muy antigua, ca. siglo IXº, reconstruída en 1526, cuando fue convento dominico, pasando luego a ser casa general de los teatinos, en 1555. Después de la toma de Roma por los garibaldinos, en 1870, los edificios conventuales fueron usados como cuarteles, y se reformó la fachada y el entorno del antiguo templo por motivo de las profundas obras de reurbanización que afectó a toda aquella zona, ahora lindante con el eje que divide el centro de Roma, por Corso Vittorio, Via Nazionale y Piazza della Repubblica. La fachada actual es neo-renacentista; al entrar, un sorprendente atrio, con una monumental doble escala con balaustrada, salva el desnivel en que ha quedado la iglesia con respecto a la entrada de la via 24 Maggio. El interior está ricamente decorado, con mármoles y estucos dorados. Destaca la capella della Assunta (Capella Bandini) con una preciosa Asunción de la Virgen, óleo sobre pizarra del pintor manierista pre-barroco Scipione Pulzone; en nichos, a ambos lados del altar, esculturas del Algardi; en las pechinas de la cúpula, pinturas del Domenicchino, con escenas alusivas del Antiguo Testamento.
Una de las capillas está dedicada a la Madonna della Catena, una antigua imagen de la Virgen (Mater Lactans), ca. s. XII-XIII. El antiguo icono de la Madonna está embutido en un nicho, rodeado por un lienzo del 1ª mitad del XVII con la representación de San Pio V (izqdª) y el cardenal Alessandrino, nipote de Pio V (en figura de San Carlos Borromeo?), obra de Giacinto Gemignani. Este altar es el enclave concreto de la anécdota que ha motivado el presente artículo.
Como dije al empezar, encontré la referencia en la página de la Provincia Romana de la Congregación de la Misión. Allí mismo, se encuentra publicado un profilo/semblanza de Mons. Annibale Bugnini, muy laudatorio, con notas biográficas, recuerdos, referencias personales y algunas fotos, bastante interesante. La primera parte parece ser una necrológica (suscribe un tal G.F. Rossi c.m.), destacando la reseña de las palabras que en aquella ocasión pronunció el Cardenal Casaroli, dignas de consideración. El texto no permite copiarlo (desactivado copy) y me disculparán ustedes que no lo traduzca. Pero sí he traducido este otro texto, más breve, firmado por el p. Carlo Braga, antiguo colaborador de Bugnini, de su misma congregación misionera, donde figura la historieta que me llamó la atención:
En los años del Concilio Ecuménico Vaticano II, la casa fue habitada por el p. Annibale Bugnini C.M. (1912-1982), que fue secretario de la Comisión Preparatoria del Concilio (1959-1962); secretario del Cosilium ad Exquendam Liturgiam (1964-1969). El 6 de Enero de 1972 fue nombrado Arzobispo Titular de Diocleziana, y fue ordenado obispo el 13 de Febrero de 1972. Ocupó el cargo de Secretario de la Congregación para el Culto Divino, del 5 de Mayo de 1969 al 4 de Enero de 1976, cuando fue nombrado pro-nuncio en Irán, donde permaneció hasta su muerte, que le sobrevino durante una estancia en Roma, el 3 de Julio de 1982.
En la redacción de los textos de su famoso volumen sobre la Riforma Liturgica (1948-1975), Monseñor Bugnini recordaba así la casa de San Silvestro al Quirinale:
" San Silvestro al Quirinale, la casa religiosa vicenciana, queridísima para mí, no sólo porque en ella pasé la mayor parte de mi vida romana, sino sobre todo porque entre aquellas muros, en aquella iglesita, 'tutta d'oro e trapunta di straforo' (toda dorada y acolchada con paños), como en el siglo XVI se expresaba el dominico Fra Mariano, en aquellas mismas estancias que yo habitaba me parecía como si todavía alojasen la presencia del Cardenal Guglielmo Sirleto (+7 de 1585) y de la comisión litúrgica, compuesta casi toda ella por teatinos, que a apartir de 1566 concluyeron la reforma litúrgica decretada por el concilio de Trento, bajo San Pio V. San Silvestro era desde hacía diez años (1555) la casa madre de los teatinos, que habían organizado allí un centro de estudios y de espiritualidad bíblica y teológica. El Misal que usaba el Cardenal Sirleto, anotado por el mismo, con apostillas para la reforma litúrgica, ahora conservado en la Biblioteca Vaticana, lleva el sello " Biblioteca Sancti Silvestri". Estos detalles me fueron muy queridos, viendo en mis propias circunstancias personales casi la continuación de una tradición, preciosa entre todas aquellas que forman la vida de la Iglesia."
En pleno periodo de agitación por la gran renovación de la Iglesia y de la reforma litúrgica, en encendida polémica sobre el particular de la Misa, un semanario humorístico italiano publicó una serie de artículos bastante ocurrentes. Monseñor Bugnini lo recuerda así en su libro:
" Alguien próximo al director de la sección romana del periódico, para informarse en directo, personalmente, de todo aquello, decidió asistir un día, de incógnito, a mi Misa, en San Silvestro al Quirinale, y vió con sorpresa que yo celebraba en un altar sobre el que había entronizada una imagen de San Pio V (en la capilla de la Madonna de las Cadenas), en latín (en aquel tiempo era obligado celebrar la Misa privada en latín). Y escribió incluso que, a su entender, el celebrante celebraba 'con fe'. Y concluía: "...¿ Pero cómo es posible que este cura pueda celebrar por la mañana delante de San Pio V, en latín, con el misal tridentino, y después, por la tarde, se dedique a imponer a la Iglesia la misa reformada en lengua vulgar, traicionando al Concilio de Trento ? "
Esta es la anécdota: Monseñor Annibale Bugnini celebrando devotamente la Misa que él mismo estaba desmontando, desfigurando y sustituyendo, hasta quedar proscrita. Entiendo que el propio Bugnini, que es quien la cuenta, le confiere cierto tono de apología pro vita sua, post eventum, como ilustración de su labor durante el controvertido capítulo de la reforma litúrgica promovida por el Concilio.
Un querido amigo, para atormentarme, me recuerda de vez en cuando que Bugnini también participó de forma muy directa y decisiva en la reforma de la Semana Santa efectuada bajo Pio XII, detalle este que me trago como una amarga píldora, reconociendo con reluctancia que aquella discutible proto-reforma pacelliana fue el prefacio de la desastrosa que seguiría bajo el Papa Montini.
No imagino a Bugnini como un perverso e intencionado criminal litúrgico. Opino que fue el último peón de una jugada mucho más compleja, con más personajes alentando y dejando hacer. Culpar a Bugnini del Novus Ordo que Pablo VI promulgó es una de esas exculpaciones que intentan descargar al superior echando el fardo pesado encima de su subalterno. Se quiera reconocer o no, el autor formal y el responsable último de la reforma litúrgica vaticanosegundista es Pablo VI, con todas las consecuencias que de ello puedan derivarse.
No hará falta que subraye la profunda antipatía que siento por Monseñor Annibale Bugnini y su obra, tan lesiva para la tradición de la Sagrada Liturgia Romana. Si bien fue el instrumento empuñado por otra mano, de hecho fue el ejecutor de aquella desafortunada demolición. Su figura resulta lastimosamente patética. Dudo de que hubiera sido masón, como algunos le acusan; un masón, de haberlo en esas altas esferas curiales, no termina su curriculum de pro-nuncio en Irán.
La preciosa imagen de la Stmª Virgen de las Cadenas sigue allí, en su altar de San Silvestro, donde celebraba Mons. Bugnini. A sus plantas, desde el lienzo, San Pio V también permanece extático e implorante, como una profecía iconografiada de la Iglesia que suplica el amparo de la Madre Nutricia del Redentor. Nada ha terminado, aunque todo haya pasado: Trento sigue vivo, aunque relegado, y el Vaticano II va tener el próximo Año de la Fe para ser recordado. El Santo Papa Ghislieri reformó piadosamente la Sagrada Liturgia que le fue transmitida, la depuró, la perfeccionó y promulgó solemnemente un Misal que nutrió la piedad de los fieles durante cuatro siglos, con frutos notables y abundantes de santidad. La reforma litúrgica atribuída al Moseñor que celebraba bajo su imagen no es tan prístina, ni ha fructificado tan ricamente, ni ha dejado de ser objeto de controversia desde que entró en vigor, siendo uno de los más desconcertantes y confundentes capítulos del post-concilio.
Cuando leí la anécdota que he transcrito aquí, me imaginaba al San Pio V del altar de la Madonna uniéndose a las intenciones de la Misa 'tridentina' que Bugnini celebraba, rectificando con su intercesión, desde la Iglesia Triunfante, las graves consecuencias que para la Iglesia Militante acarrearía la neo-liturgia que gestaba aquel Monseñor (que en gloria esté el sacerdote que fue) cuyo nombre sigue siendo tristemente recordado por quienes sufrimos los efectos de su controvertida labor.
+T.
22 comentarios:
Padre Terzio.
Vd. que es sacerdote, estará mejor preparado que yo en angeología.
Todo buen católico sabe que el espíritu angélico malo, es superior en astucia, maldad e inteligencia a todos los hombres juntos, sean o no eclesiásticos.
Entonces sigamos la trayectoria del agente masón o comunista, que es preparado en la logia, que es imbuido por el espíritu demoníaco de la inteligencia y astucia refinada.
Este agente se introduce en el seminario o convento, se ordena sacerdote, asciende en la carrera eclesiástica y llega a arzobispo o a cardenal.
Bugnini, aunque no puedo asegurarlo
tiene todas las trazas de ser un agente de la masonería.
Llegado aquí no se asuste ni se espante Padre, todo esto sucedió en la Iglesia por permisión divina.
Y ahora volviendo al tema que nos ocupa, para mí estas anécdotas que cuenta de Monseñor Bugnini, son sólo eso: anécdotas que no me dicen nada y que llegó muy alto en la carrera eclesiástica con todas las probabilidades de ser masón.
Vd. Padre deberá tener en cuenta, que el espiritu angélico malo, imbuye de tal manera a sus agentes aquí en la tierra, que son capaces de 1º pasar el filtro de discernimiento de la Iglesia, 2º mimetizarse de tal forma que aparezcan como los hombres más buenos y virtuosos, 3º son capaces de ascender en la carrera eclesiástica, sin que nadie los descubra.
Sólo con la ayuda del Espíritu Santo, con la invocación del Arcángel San Miguel, se pueden vencer y descubrir, con la sóla teología y conocimientos humanos es imposible.
Por eso los masones infiltrados quitaron la oración al Arcángel San Miguel patrono y protector de la Iglesia.
Eso es afinar la puntería, a ver si cunde el ejemplo...
Lo de Bugnini masón... bueno... es cuestión de opiniones... yo por lo que veo diría que sí es bastante probable que lo fuera, de hecho si pasó sus últimos años en Irán fue precisamente (eso se dice) porque P6 descubrió el pastel (la famosa lista de cierta logia en la que aparecía Bugnini), es decir, que fue orden directa del Papa, y no nos engañemos la masonería tampoco es ni todopoderosa ni estúpida y siempre ha sabido recibir el golpe en silencio cuando las circunstancias lo han aconsejado, y en aquel momento lo aconsejaban. Hoy día, tan prepotentes, enchulados y poderosos, yo creo que mas bien devuelven ese tipo golpes directamente.
Otro argumento sería el preguntarnos si es imposible que fuera masón. ¿Es que no hay masones entre la Iglesia? Si, por cierto, y grandes pecadores a pesar de que (tengo entendido) JP2 levantara la condena a la masonería (otra de sus "grandes jugadas maestras"... aunque por cierto muy coherente con lo enseñado en el CV2... ). ¿Y no puede haber mas concretamente masones en el clero? Yo tengo entendido que no solo puede sino que los hubo, y muchos, y por sentido común debe seguir habiéndolos, y muchos, y de muy alto rango también. ¿Y en el Vaticano, puede haber masones? Por las mismas razones, yo creo que puede y que mas aun debe de haberlos.
En cualquier caso no tenemos certeza ni pruebas irrefutables sobre lo de Bugnini y otros posibles casos. Pero tampoco hace falta ser masón para actuar de topo minador ad intra, basta con ser liberal, progresista, modernista, etc... que son la consecuencia lógica y los tontos útiles que precisamente ha estado promoviendo esa masonería "posiblemente" infiltrada.
Todos sabemos que en las guerras uno de los factores mas determinantes por encima de los demás es el de la información, es decir de la labor desempeñada por los servicios de inteligencia, espionaje y contraespionaje, y el diablo sabe perfectamente que la batalla a campo abierto o el asedio y asalto violento a la fortaleza lo tiene perdido, ergo... se dedica a hacer lo que mejor sabe...
Y la batalla del espionaje y las conspiraciones es una batalla silenciosa, como el combate subacuático, de lo hecho y acontecido en ese campo de batalla solo tiene constancia un limitado número de comandantes y oficiales, así que no esperemos que mañana en la prensa católica se publiquen todas las logias y masones habidos y por haber dentro de la Iglesia. Si las hay y si los hay (yo opino que si, que es de sentido común) eso no lo vamos a saber mientras la guerra se siga librando, y después ya se vería, según el resultado de la contienda... cuyo resultado final ya lo conocemos... así que todo se acabará sabiendo a su debido momento, según la voluntad de nuestro Padre.
Para ser sólo el ministro de un encargo superior, parece que Bugnini se tomó muy a pecho su tarea devastadora.
La anécdota de la misa en latín, en una bella iglesia, más que a un devoto revela al elitista descreído. La liturgia y el arte tradicional, para él, eran un cadavre exquis. Su belleza podía deleitar a los gustos refinados, pero había que arrebatársela al pueblo (y a Dios). He conocido algún eclesiástico así: iconoclasta en liturgia, pero que en casa oía gregoriano y coleccionaba arte sacro.
Alguna vez ha escrito Vd. sobre el enigmático carácter de Pablo VI, un personaje patético, casi esquizofrénico, a quien atormentaba y compungía el destrozo que él mismo impulsaba en la Iglesia. Se cuenta que una vez preguntó a su ceremoniero si la Capilla estaba preparando el Vexilla Regis para el Viernes Santo, y cuando Mons. Dante le dijo: «Eso lo ha abolido Vuestra Santidad», el Papa casi se echa a llorar.
Yo prefiero no pensar mucho en el papel equívoco de Pablo VI: «huir el rostro al claro desengaño».
Lo de Bugnini era otra cosa, aunque a veces jugó al mismo equívoco. Hay algún texto suyo muy curioso censurando abusos litúrgicos que después promovió abiertamente. Pero eso era mera estrategia. «Para conseguir este fin con éxito y sin peligro, será necesario preservar algunas de las ceremonias de la misa antigua para los de mente débil, quienes se escandalizarían con un cambio muy rápido». Esta frase es de Lutero, y no digo de qué blog la tomo para no señalar.
Estimado Mendrugo (siempre interesante), yo mismo siento (y sufro) toda la contradicción de este triste capítulo: Pablo VI es el Papa que recuerdo desde la infancia; mientras más profundizo en el personaje, más inquietante me parece. De los secundarios como Bugnini tengo hecho un concepto muy negativo, aunque atemperado por consideraciones que dejan al sujeto en su puesto y nivel, sin culparle de todo porque todo no dependió de los subalternos, sino de la la cabeza que dirigía y decretaba.
Pienso que cuanto más perspectivas tengamos más matices contaremos, pero estos no alterarán los juicios fundamentales sobre los protagonistas, tan desafortunados. La reforma litúrgica no se hizo bien y el desastre debe imputársele al Papa Montini, conscientemente autor y consumador. Bugnini, visto y presentado como encarnación de toda la nefasta trama, puede valer como protagonista de anécdotas, pero no se puede concentrar en un monseñor secretario de congregación la responsabilidad de algo que el Papa, a la postre, quiso e hizo (aunque luego, también en algunos momentos anecdóticos, le pesara, tampoco nunca corrigió lo hecho ni rectificó efectivamente las tendencias).
Pero, como alguna vez he comentado en el blog, el tema de la reforma liturgica tiene precedentes remotos e inmediatos que, en cierto sentido, fueron marcando la deriva que se explicitó en las desgraciada reforma vaticanosegundista, quizá por encima de las expectativas previas de los mismos implicados.
'
Es curioso cómo los "tradicionalistas" que hoy tienen se setenta años para abajo culpan a Pablo VI de todo aquello, mientras que los que aún quedan vivos con más de ochenta años, los que estuvieron en el ajo en aquella revolución y que con enorme sufrimiento padecieron la imposición del nuevo rito manu militari, a veces represaliados fuertemente, sin exonerarlo del todo, sí que lo consideran manipulado por aquella camarilla y hacen recaer la mayor parte de la responsabilidad de aquel desastre en Bugnini, Noè y los demás.
P. Terzio, si se refiere al texto titulado "RICORDO DI MONS. A. BUGNINI", aquí, les dejo un enlace para su descarga en formato .DOC (lo he tomado de la página):
RICORDO DI MONS. A. BUGNINI
Salu2. Paz y Bien.
P.D.: Si se refería a otro texto, mis disculpas. :P.
Doy por hecho, páter, que bien conoce Vd. el interesantísimo libro de Michael Davis titulado "El Concilio del Papa Juan"
En relación con la pertencia a la Francmasonería del infausto Bugnini, se dice lo siguiente:
El estado al que han reducido la liturgia romana, la gloria más grande de la Iglesia y de la civilización occidental, brinda un testimonio desgarrador de la eficacia con que estos enemigos perniciosos realizan su tarea. El 8 de octubre de 1976, el periódico Le Figaro publicó un informe en el que se afirma que el Arzobispo Bugnini niega haber tenido alguna vez contactos con la Masonería, y por justicia hacia el Arzobispo, hay que tener en cuenta esta desmentida cuando se analiza la afirmación de que es masón, según lo señalado en este capítulo y en otras partes del libro.
En complemento de la pública acusación hecha por Tito Casini en abril de 1976 en un libro vendido en las librerías católicas de toda Italia (véase nota 427), y desmentida sólo seis meses después en octubre, he hecho mi propia investigación, y puedo garantizar personalmente la autenticidad de los siguientes hechos. Un sacerdote entregó en las manos del papa mismo unos documentos que afirmó probaban la evidencia de que Monseñor Bugnini era masón, y advirtió que si no se tomaba una drástica medida se vería obligado en conciencia a hacer públicos los hechos. Luego vino la serie de hechos descritos en pp. 225-226.
Pude establecer contacto directo con el sacerdote en cuestión, a través de un amigo común, otro sacerdote, hombre de suma integridad y sobresaliente erudito. Le pregunté si sería posible publicar detalles de las pruebas. El sacerdote que las había presentado al papa, respondió: ―Per quello che mi chiede, sono spiacente di non poter fare nulla. Il segreto che deve circondare quella denuncia (per la quale Mons. Bugnini dovette andarsene!) è 'top secret' e tale deve restare. Per molte ragioni. Vi basta il ̳fatto‘ che il suddetto Monsignore fu subito mandato via del suo ufficio. Significa che gli 'argomenti' furono più che probanti!. No veo aún la alternativa de otra explicación coherente, ni siquiera convincente, para la abrupta, inesperada y sin precedentes dimisión y eventual destierro de un prelado en una posición de tanto poder e influencia.
En el mismo sentido escribe Michael Davis:
Cualesquiera que hayan sido sus intenciones, es evidente que si el Arzobispo Bugnini hubiese tratado de destruir la liturgia romana, y de destruir la Misa, no podría haberlo hecho con más eficacia. Resulta obvio que las pruebas contra Bugnini que se le presentaron al papa deben de haber revestido una evidencia de gravedad excepcional para que éste, para consternación de los liberales, no sólo lo separara del cargo de secretario de la Congregación para el Culto Divino, sino que disolviera esa misma Congregación y la fusionara con la de los sacramentos. Los liberales no ocultaron que consideraron esto como un paso muy retrógado que podría hacer peligrar el futuro de la reforma de Bugnini.
Las sospechas aumentaron cuando se lo envió a Irán como pro-nuncio y no causó gran sorpresa cuando en abril de 1976, un prominente escritor católico de Italia, Tito Casini, expresara públicamente que: ―La reforma fue realizada por ese Bugnini, a quien por fin se ha desenmascarado; es verdaderamente lo que hace tiempo sospechábamos: un francmasón.
PEDRO HISPANO dice: Lamento no tener a mano la obra pero el dato es seguro. En la "Historia de la Tradición Benedictina" de García Mª Colombás se dice abiertamente que en el siglo XVIII era frecuente el caso de monasterios que disponían de su propia logia masónica.
Y añado yo esta observación: El que figura en la Historia como fundador de la masonería española -el Duque de Warton- abrió la primera logia en la calle San Bernardo de Madrid -que seguramente deba el nombre a la presencia en ella de una iglesia de cistercienses que tenía como titular a su santo patrón- y fue a morir -yendo camino de una estación termal- en un monasterio cisterciense en el que sería enterrado:Poblet.
Pedro Hispano, lo que falta añadir es que en la primera mitad del siglo XVIII la masonería no estaba prohibida por la Iglesia. No será hasta 1738 cuando se prohiba y el duque de Wharton muere en 1731.
A Bugnini se la jugaron bien jugada al estilo que estamos viendo hoy se sigue jugando en la curia. Eso con independencia de su obra destructiva, que coincido con el pater, no se le puede achacar enteramente a él como único responsable. La cosa venía de lejos.
Fortu, muchísimas gracias por tu instrucción; como habrás imaginado, soy analfabeto cibernético y apenas sé cuatro cositas para manejarme con el pc y el internete: Muchas gracias otra vez (el comentario se me ha borrado, no advertí que lo tenía marcado y se ha borrado con otro que suprimí, perdóname). Gracias también por el 'dossier Bugnini', recuerdo algunos artículos de 30Giorni, pero ese texto en pdf lo desconocía.
Antonius, escribes unas cosas tan raras que me asustas. Sobre lo que cuentas, te recuerdo que la invocación a los espíritus está considerado por la Iglesia algo muy grave y peligroso, además de una superstición.
Sobre todo lo demás insisto: Mandar a Bugnini a Irán y mantener la liturgia reformada/desmontada/deformada por Bugnini es una enorme contradicción. Bugnini ejecutó, pero la responsabilidad última no fue suya: No fue Bugnini el que aprobó y promulgó la neo-liturgia post-conciliar.
Y de lo de los masones en los monasterios, no sé qué decirte, PetrusH. Parecen cosas de literatura-ficción...que a lo peor un dia se descubren tan reales como la vida misma. El Señor nos libre.
'
Pero por supuesto quiene debemos sufrir esa liturgia somos nosotros y si por casualidad encontramos algún monje que celebre su misa privada y la comparta con los fieles dura poco. Como me pasó a mi. El obispo hizo que trasladasen al monje que celebraba en latín no vaya a ser que la gente despierte de su letargo y pida que celebren esa misa... como dijo alguien cuyo nombre no recuerdo paolo sesto mesto.....
PEDRO HISPANO: a los que se han hecho eco de mi comentario les doy las gracias.
MILES: agradezco sus precisiones que ya conocía y que tengo que añadir que la medida pontificia fué sólo relativamente eficaz especialmente en paises regalistas como Francia donde el Parlamento ejercía un bloqueo permanente a los documentos pontificios. De ahí que la infiltración masónica en el clero no se detuviese por la bula In eminenti de Clemente XII. De hecho en otro lugar nada sospechoso de simpatías masónicas he leido que entre los muchísimos clérigos asesinados durante la revolución -a fines por tanto del XVIII- algunos eran masones. O sea desobedientes al Papa ma non troppo y que cuando les exigieron cosas inadmisibles para su conciencia prefirieron morir antes que ceder. Lamento de nuevo no tener a mano la fuente perdida a causa de cambios de destino -dos traslados equivalen a un naufragio- pero ahí hablaba de esto y mostraba una lápida conmemorativa que los hermanos tres puntos habían colocado en algún lugar de Francia en honor de los clérigos en cuestión.
D.TERCIO: Si he escrito lo de las logias monásticas del siglo XVIII es porque su fuente es de un historiador monástico de altura y nada sospechoso de integrismo: Dom García María Colombás en una obra de varios volúmenes titulada LA TRADICION BENEDICTINA. Al precio que lo compré lo vendo. Además grande tuvo que ser esta infiltración cuando un elevado número de los que escribieron la Enciclopedia eran clérigos. Otra cosa es que todos ellos fueran masones pero no deja de ser un indicio de la mentalidad general en un siglo en que la masonería era casi una moda. Y cuando tenga el gusto de verle personalmente le diré el nombre de un curial actualmente en funciones que cuando le pregunté si era verdad que en el Vaticano había clérigos masones me respondió textualmente: "Eso es evidente"
Así que no hay que obsesionarse por el tema y ver masones en todas partes pero tampoco negar la realidad.
Don Terzio tiene razón. Bugnini será masón o todo lo que quieran algunos, pero ahí no se ha movido ni un pelo sin la aprobación de Pablo VI. Por tanto, el responsable principal es Pablo VI y todo lo demás es echar balones fuera. Lo que ocurre es lo de siempre: es más cómodo cargar el muerto a Bugnini que a un Papa; así que se opta por la típica inversión de las jerarquías (a mayor jerarquía menor responsabilidad, al contrario de lo que debería ser).
Páter, las logias masónicas de los EEUU llegaron a Méjico y comenzaron a promover la independencia de la corona española. El cura Miguel Hidalgo y Costilla, Miguel Allende, Abasolo, el cura José María Morelos, todos ellos eran masones y ávidos lectores de los enciclopedistas franceses. La masonería consideraba a España un baluarte del catolicismo y había de desmembrar el imperio español. Y lo lograron. Hoy día que ya no tiene imperio, tratan de acabar con las últimas trazas de cristianismo, aliándose con los idiotas útiles de todos conocidos, que hasta condecoran a los zapateristas salientes.
Lo siento, esto está en inglés:
First here is a quote by Dietrich von Hildebrand from his book The Devastated Vineyard, "Truly, if one of the devils in C. S. Lewis's The Screwtape Letters had been entrusted with the ruin of the liturgy, he could not have done it better." ; Next here is a little story that was told to a small audience by Dr. Alice von Hildebrand: Her husband's uncle, who was ambassador of the Vatican to Austria, had noticed the actions of Bugnini were somewhat suspicious. He then took his concern to a bishop (whose name was withheld) and so this bishop sent a priest to infiltrate the files at a particular Masonic Lodge. The priest had a successful mission and uncovered documents that proclaimed Annibale Bugnini a Mason. This case was brought to Pius VI by the anonymous bishop and he told the Pope that he had to do something or he would publicise the documents he found! In the story that was told Dr. Alice von Hildebrand said he went into a rage and the bishop left with no answer. The next day Bugnini was exiled and a few days after that the priest that discovered the papers was found ritually murdered!!! Very scary thought that the hierarchy of the church is that far infiltrated!
Saludos, páter Terzio.
"Es en el nombre de la tradición que pedimos a nuestros hijos e hijas, y a todas las comunidades católicas celebrar con dignidad y fervor la liturgia renovada. La adopción del novusordo no se deja ciertamente a la libre elección de sacerdotes y fieles. La instrucción del 14 de junio de 1971 ha previsto, con la autorización del ordinario, la celebración de la misa en la vieja forma sólo para sacerdotes enfermos y ancianos, que ofrecen el divino sacrificio sine pópulo" .
"El Novusordo fué promulgado para ocupar el lugar del viejo, despúes de una madura deliberación y siguiendo el pedido del Concilio Vaticano II en forma no diferente que nuestro predecesor Pio V hizo obligatorio el misal reformado bajo su autoridad, siguiendo el Concilio de Trento. con la misma suprema autoridad que viene de Jesucristo, reclamamos la misma obediencia a otras reformas pastorales, litúrgicas y disciplinarias que han madurado en estos años de implementación de los decretos del concilio." Paulo VI
El plan original había sido eliminar todo rastro del rito romano, destruirlo, arrasarlo, borrarlo de la faz de la tierra. Porqué tanto encono, tanto odio, tanto desprecio hacia la Santa Misa? Gentes que habían crecido con el venerable rito romano lo perdieron de la noche a la mañana. Sólo sobrevivió milagrosamente por obra y gracia del Espíritu Santo y de unos pocos fieles sacerdotes. La historia no acaba aquí. YA AMENAZARON CON ALTERAR EL MISAL DE 1962 CON NUEVAS ADICIONES, EL NUEVO SANTORAL Y QUIZAS ELIMINAR la oración del Viernes Santo por los judíos. Va a incluir a Teresa de Calcuta, José María Escriba Albás, al beato magno Wojtyla y los novecientos y tantos santos del juanpablismo. Perdón por extenderme.
Páter.
Estoy hablando de exorcismos que según se dice son oficiales y aprobados por la Iglesia, no estoy hablando de invocación de espíritus (... por favor...), a no ser que con eso se refiera a que María les ordena decir la verdad, aunque no veo cual es el problema en eso pero me someto sincera y humildemente al magisterio y juicio de la Iglesia si lo hay sobre el asunto.
Para hacerse una idea de lo que estoy diciendo lo justo en pasarse un rato por ese texto, echarle un vistazo y entonces poder hablar con mas propiedad, lo que he contado lo he dicho de memoria aunque de forma quizás demasiado escueta. Lo que yo he dicho es insuficiente y puede dar a mal entendidos. Por favor si puede échele un vistazo y si la cosa es mala entonces alértenos porque se tratan cosas muy serias. Yo lo que estoy preguntando mas que nada es si alguien tiene conocimiento sobre la autenticidad de los hechos relatados, los sacerdotes citados, etc... para descartar que sea un invento. Yo en principio tengo entendido que no lo es. Se dicen cosas de extrema gravedad en ese documento así que si es una farsa urge denunciarla, y en cualquier caso y como siempre en estas cosas hay que leer con mucha prudencia.
Ave María Purísima.
Y de lo de los masones en los monasterios, no sé qué decirte, PetrusH. Parecen cosas de literatura-ficción...que a lo peor un dia se descubren tan reales como la vida misma. El Señor nos libre.
Bueno, pero si el pastel está yo lo que digo es que de lo que Dios nos libre sea de que no se descubra. Yo le pido a Dios que se descubra todo: la infección dificilmente puede ser tratada si ni siquiera es reconocida y descubierta. Además, si hasta un arzobispo parece ser que es masón, ¿por qué no lo van a poder ser unos monjes? Debe de haber literatura de investigación acerca de la infiltración de la masonería en la Iglesia con casos documentados. De hecho es lo normal como dije antes, los servicios de inteligencia siempre tratan de infiltrarse en el enemigo y casi siempre lo consiguen en mayor o menor medida. Lo que me costaría mucho creer es que ni jamás hubo y no hay hoy ni un solo caso de infiltración a ningún nivel (y posiblemente no solo infiltración masónica), no hay mas que echar un vistazo y ver donde estamos y como hemos llegado, que por casualidad no ha sido, sino por causalidad.
Por cierto, como no ha publicado el "peligroso" comentario, cualquiera que lea lo que me ha dicho puede pensar de mí cosas que no son, lo cual es injusto.
Bueno páter, una rápida investigación de 5 minutos y parece ser que los sucesos son reales, el exorcismo real, y las transcripciones auténticas. Así que me doy por auto-respondida la pregunta.
Se trata del exorcismo de Anneliese Michel, dirigido por el padre Arnold Renz. Investigue usted si quiere, no tiene desperdicio, hay material abundante, fotografías y hasta las grabaciones originales se pueden encontrar. Solo a modo de ejemplo:
http://www.jesustebusca.com.ar/ES/arnold-renz_2.aspx
http://holywar.org/txt/complot/manueldearbues/advertencia.htm
http://www.youtube.com/watch?v=x4n9vK0_mdk
http://es.wikipedia.org/wiki/Anneliese_Michel
(Perdón por citar la mentipedia).
Otra cosa es que los demonios dijeran la verdad, sobre lo cual yo no me pronuncio sino que lo considero con mucha prudencia aunque por lo que veo no hay nada en contra de la doctrina sino "todísimo" lo contrario, y acerca de las declaraciones sobre sucesos concretos lo cierto es que suena bastante coherente lo que se dice y explica mas que confunde, arrojando claridad donde hay desconcierto.
Yo no comprendo de que se asusta usted, ¡somos católicos!, y si somos sinceros católicos razón de menos para temer, por no decir que el que reza diariamente el Santo Rosario con devoción tiene la protección garantizada de María Madre de Dios y Señora, Madre e Intercersora nuestra.
Ya ve que nada que ver con eso que ha dicho de supersticiones e invocación de espíritus, de hecho me ha extrañado que dijera eso, quizás tiene un concepto equivocado sobre mí. Lo que me preocupa es que cualquiera que pase por aquí y lea esa observación suya se lleve una idea equivocada de Antonius y luego vaya contándolo por ahí: Antonius, ese supersticioso, ese interesado en cosas raras e invocación de espíritus. Que injusto.
Con cariño y amor fraternal.
Antonius, toda la prudente discreción con que la Iglesia trata esos casos se vuelve vana curiositas y/o peligroso interés cuando se publica y se difunde, pudiendo captar la atención de personas susceptibles de sufrir mucho daño.
De suyo, un cristiano no necesita apoyarse en supuestas declaraciones de espíritus inmundos para creer y/o apreciar lo que debe ser creído y apreciado. La fe no depende de este tipo de 'pruebas', cuyo valor es muy relativo.
Todo lo que te he dicho ha sido con mi mejor intención sin pretender descrédito alguno, al contrario. Más bien me ha movido la preocupación de que te vieras sujeto a criterios engañosos o perjudiciales.
La santidad más alta es la más sencilla y amable.
'
Publicar un comentario