domingo, 23 de noviembre de 2008

Dia de San Clemente


Tal dia como hoy, un 23 de Noviembre de 1248, se rendía Sevilla a Fernando IIIº el Santo. El reyezuelo Axataf, después de dos años de asedio y cerco, entregaba la ciudad a los cristianos. Al poco, ondeaba el blasón del rey de Castilla en la Giralda, el alminar de la mezquita que los moros levantaron sacrílegamente sobre la antigua Basílica paleocristiana-visigótica, que destruyeron.

Cada 23 de Noviembre, para celebrar la efémerides y como acción de gracias, el Cabildo Catedral procesiona solemnemente llevando las reliquias del Papa San Clemente y la Espada del Santo Rey, dos reliquias vinculadas al dia y al personaje, el Santo y el Conquistador (Santo también).

La procesión es de Tercia, después del canto de Láudes y antes de la Misa Coral. Arranca del Altar Mayor y hace estación en la Capilla Real, donde está descubierta la urna de plata de Laureano de Pina que conserva el cuerpo incorrupto de San Fernando. El Cabildo municipal en pleno, bajo mazas, que asiste obligadamente a la celebración, destaca a dos de los ediles para que recojan de manos del canónigo capellán real mayor la Espada y el Pendón de Castilla. Hacen juramento de devolver la Espada tras la procesión, y toman la Espada por la punta, con paño de brocado (el Alcalde o su delegado; sólo el Rey, los Príncipes y los Infantes) y el Pendón Real (que es tradición que sea portado por el concejal más joven). Se incorporan a la procesión del Cabildo Catedral y procesionan juntos escoltados por la guardia Municipal, de gala.

Actualmente la procesión transcurre desde el Altar Mayor por delante de la Capilla Real y sigue por últimas naves hasta el trascoro, y vuelta al Altar Mayor para la Misa. Antes, hasta el '79 o el '80 (no recuerdo la fecha), la procesión iba por las Gradas Altas, saliendo por la Puerta de los Palos y entrando por la del Baptisterio. Los canónigos, muy perspicaces, viendo el rumbo que iban tomando las politiquerías, prefirieron quedarse dentro de la Catedral y no salir a la calle. Al poco de tomar esta decisión, hubo algunos 23 de Nov. manifestaciones pro-islamistas y contra-fernadinas, irreprimidas y consentidas gustosa y amablemente por los tolerancistas en el poder (y eso que todavía no había llegado los tiempos del Aliador de incivilizaciones ni el canguelo por los atentados de la morería fanática).
El relicario de San Clemente que se lleva en la Procesión de la Espada es un antiguo vaso romano de pórfido, que contiene las reliquias del Santo Pontífice, con vástago y pié de orfebrería, rematado por una preciosa imagen del Papa sedente, con tiara y ornamentos pontificales, de plata y oro. Si no recuerdo mal, llegó a la Catedral con otras ricas preseas como legado del célebre Cardenal Albornoz.


La Espada del Santo Rey llegó a la Catedral por permuta con la Abadesa y las Reverendas Madres del Real Monasterio Cisterciense de San Clemente, que conservaban desde tiempos de su fundación alfonsina varias reliquias del ajuar de San Fernando. Cambiaron la Espada por una concesión del agua de los Caños de Carmona, que derivaron un canuto del canalillo para dar al Convento agua corriente.


Las monjas de San Clemente, celebran la fiesta de Santa Gertrudis la Magna (16 de Noviembre) con vísperas solemnes y octava-novenario, para rematar la fiesta el dia de San Clemente. Esta tarde, después de la Misa Solemne, se hace procesión claustral con el Stmº Sacramento bajo palio. Al pasar por la reja del coro bajo y el lienzo de Valdés Leal que representa al Rey San Fernando entrando en Sevilla, las monjas tiran desde las rejas del coro alto una lluvia de pétalos de rosas tardías y jazmines, mientras repican las campanillas de los comulgatorios y los coros.
+T.