lunes, 29 de abril de 2013

Lavandería

Una de las formas frecuentemente usadas por el des-catolicismo para 'poner en crisis'(?) la fe católica y sus prácticas ha sido una cierta adaptación vulgarizada de la reducción al absurdo: Con una comparación jocosa se ridiculiza aquello que se quiere criticar o dejar en evidencia. Es un recurso muy utilizado en las predicaciones populares, en los sermones parroquiales. Algunos grupos o movimientos usan habitualmente este tipo de descalificaciones irónicas (pienso en los 'rollos' de los Cursillos de Cristiandad y en las catequesis de las Comunidades Neocatecumenales, por ejemplo).

El lenguaje coloquial, cuando se trata de predicar la doctrina, la teología o la moral, conlleva el riesgo de la equivocidad: Si no se capta adecuadamente, si el auditorio no sintoniza verbal y conceptualmente con el orador, se pueden sacar conclusiones erróneas. Este tipo de discursos también puede dañar la fe de los sencillos, que muchas veces se deforma o traumatiza. La burla es un formato peligroso para la predicación.

El Papa Francisco, en sus sermoncillos de Santa Marta, suele utilizar un lenguaje directo, familiar, coloquial. Si fuera un párroco en su parroquia, predicando a su feligresía, a gente que conoce y que conocen su estilo, sus expresiones, ese tipo de homilía popular-catequética, podrían valer, incluso ser muy oportuno. Pero el Papa Francisco ya no es Don Jorge, el cura.

Esta mañana, ha dicho esto:

"...Tantas veces pensamos que ir a la confesión es como ir a la lavandería. Pero Jesús en el confesionario no es una lavandería".

Ha dicho, en el mismo contexto, más cosas. Aquí se recogen, en el resumen publicado por el boletín diario de Zenit:

La bendita vergüenza de la confesión. Consoladora homilía de Francisco en la misa diaria

Todo eso, que podría decirlo yo mismo (aunque estoy casi seguro de que yo nunca diría (ni he dicho) algunas de las cosas que dice el Papa Francisco), el Papa no debería decirlo.

En cuanto lo he leído, pensé que decir que la confesión no es 'lavandería' puede equivaler a decir que no es 'lavado', y en consecuencia que no existen, pues, las 'manchas'. Etc. etc. etc.

Desde el 'lava me, Dómine, ab iniquitate mea' del Miserere, al Dogma de la Inmaculada Concepción (en cuya definición se usa expresamente la palabra 'mancha') y otros cientos y miles de oraciones y textos teológicos, morales y espirituales, quedan en entredicho si se dice (si se ha dicho) que el sacramento de la confesión no es una lavandería.

No se trata de que lo explique. Sabemos lo que creemos y sabemos que es verdad. No es necesario que nos lo aclaren (?).

Lo que es urgente es que esas cosas se dejen de decir.

¿Hay alguien que se lo diga? ¿Alguien que se atreva a decírselo?





n.b. Las fotos merecen otro comentario correctivo, pero me abstengo.


+T.

22 comentarios:

Miles Dei dijo...

Es lo mismo con lo de que eso de conquistar el mundo no va. Se cargó el símil revelado de la vida cristiana como milicia. En fin.

Ἰουστινιανός dijo...

Padre, ¿cree que, con ese afán de presentar a Nuestro Señor como alguien tan bueno que está ahí sólo para perdonarnos, el Papa está dejando de lado el aspecto de penitencia propio del sacramento, al estilo de las "fiestas del perdón" que ya comentó Vd. hace algunos años?
A lo mejor soy yo el que intenta buscarle puntilla a todo.

Saludos en Cristo.
Kyrie eleison

Anónimo dijo...

Hace unos días un amigo estaba haciendo alguna crítica al Papa, y yo, tratando de sumarle algún punto, le dije: Mirá, que ha dicho que a Jesús no se lo puede encontrar fuera de la Iglesia. Y me respondió: ¿De qué Iglesia?
Cuento esto como muestra de lo nublados que están nuestros ojos por los prejuicios (muchas veces justamente formados) con respecto a quien fuera el Cardenal primado de Argentina. Yo no soy fanático de él, para nada. El día que lo eligieron casi me da un infarto. Pero ¿no le estamos buscando pelos al huevo? ¿Todo lo que hace está mal? ¿Todo lo que hace es criticable? ¿Y lo de San Ignacio de salvar la buena intención del prójimo? ¿Lo de la lavandería no se puede entender de buen modo? Digo, para darle un poco de paz a nuestra alma, sin encontrar en todo algo raro.
Fernando, un argentino de tierra adentro.

P. MATEO dijo...

P. Mateo... Que habría de esperarse ¿un pontificado lucido? No.. Dios nos libre el día que aparezca la primera encíclica puras obviedades... Teología nada, Biblia nada, espiritualidad nada, padres de la Iglesia nada... Estamos ante la decadencia... Pasara sin pena ni gloria este pontificado? Será un recuerdo del show de la falsa caridad de las pantallas y fotos? ... Hay que esperar y que Dios nos saque de esta pesadilla u pronto.

P. MATEO dijo...
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MIGUEL25 dijo...

La confesión «es un encuentro con Jesús que nos espera como somos. "Pero, Señor, mira, yo soy así". Estamos avergonzados de decir la verdad: hice esto, pensé en aquello. Pero la vergüenza es una verdadera virtud cristiana, e incluso humana.

"Juanpablismo".."Francisquismo" !!que más da ¡¡¡

Todo es una enfermedad que se llama VATICANOSEGUNDITIS, que lleva a un "aggionarse" con el mundo, y por tanto mundanizar la predicación, por eso el "francisquismo", pretende con palabras suaves y dulces, predicar la doctrina, ..igual que los inventos de Juan Pablo II, ya sabemos "jotaemejotas", movidas y espectáculos de masas, al final todo queda en vanidad y apacentarse de viento.

Puen no, los que por GRACIA,
nos hemos liberado del veneno modernista-neoprotestante del concilio Vaticano II, debemos exponer la doctrina pura y sin mancha de siempre, la que ahora bebemos en la Fraternidad Sacerdotal San Pio X.

Y en este caso la verdad de siempre es esta:

La vergüenza de ir a confesarse de manera ninguna es una virtud, NI CRISTIANA NI HUMANA, (pues no es una vergüenza por cometer el pecado, sino por confesarlo) es simplemente una TENTACIÓN DE SATANAS, que con esta maniobra, consigue (de no vencer la tentación)ir espaciando las confesiones, acostumbrarnos a vivir en el pecado tiempos cada vez más largos y así consigue llevar a muchos al infierno, porque la muerte nos puede sorprender en pecado mortal.

Este sentimiento de vergüenza, en decir la verdad al confesor y relatar con sinceridad nuestros pecados procede del séptimo pecado capital llamado PEREZA.

Pecamos de pereza, de dos maneras:

Una en sentido material, cuando no hacemos con esmero y a tiempo nuestros deberes ordinarios materiales, y dos en sentido espiritual, es decir nuestros deberes espirituales, también los tenemos que hacer con prontitud y bien hechos, la PEREZA ESPIRITUAL, se llama ACIDIA, que es lo que engendra la vergüenza de ir a confesarse.

Esto que digo yo aquí, ya no lo dice (por lo menos que yo sepa, y nunca yo lo he oido) de ningún cura "postconciliar", ni siquiera a los más viejos, que fueron ordenados y formados en la buena doctrina de antes del CVII, pues estos son los primeros que cambiaron la chaqueta, y ahora no dicen sino palabras dulces y milongas.

Pero hubo un pastor valiente que no cedió: el nuevo San Atanasio Monseñor Marcel Lefebvre, gracias a este instrumento de la GRACIA, hoy podemos beber aquella sana doctrina de siempre, que se conserva pura y sin mancha en la Fraternidad, doctrina que el nefasto Concilio Vaticano II, envenenó.

Y como él debemos predicar la doctrina TRADICIONAL DE SIEMPRE:

Hebreos: 13,8-9
8 Jesucristo es el mismo ayer y hoy, y lo será para siempre.

9 No se dejen extraviar por cualquier clase de doctrinas extrañas. Lo mejor es fortalecer el corazón con la gracia, no con alimentos que de nada aprovechan a quienes los comen.






Terzio dijo...

Fernando, no criticamos por antojo, sino por preocupación. La palabra del Papa no debería ser objeto de ningún esfuerzo para ser bien entendida, porque la palabra del Papa debe ser clara, prístina, no susceptible de equívoco: Se trata del supremo magisterio de la Iglesia; aunque esas predicaciones de Stª Marta no sean, estricta y propiamente, 'magisterio', en cuanto se publican sí son palabras pronunciadas por el Papa. Esas formas quasi coloquiales no son las adecuadas. No es Bergoglio el que habla, es el Papa Francisco.

A veces nos preguntamos si es plenamente consciente, si lo ha asumido con todas sus consecuencias (subrayo: CONSECUENCIAS).

'

Anónimo dijo...

Por eso los que dicen que Bergoglio murio y nació Francisco son de una ingenuidad inmensa.
Fernando tenga paz pero no como la da el mundo, tenga esa paz propia del que se prepara para lo peor, pero confiando en el Señor.

nick

Anónimo dijo...

...cuánta confusión generas Francisco. Que Dios te ilumine.

Quim

Wanderer dijo...

Como argentino lo digo, y por eso mismo con dolor: Bergoglio es el representante típico y acabado de la mediocridad argentina.
Como ya dijo un comentarista, su pontificado será un fiasco para todos; pasará sin pena ni gloria; lleno de gestualidades vacías que pronto comenzarán a aburrir a todos.
No creo que nos salgo con un disparate teológico: un mediocre no se anima a eso. Permanecerá en el status quo, frustrando nuevamente una verdadera y sanadora reforma de la Iglesia.
Dios, en su bondad, nos abrevie este pontificado, y que sirva para que nunca más se les ocurra a los cardenales elegir a un latinoamericano para ese puesto!

Wamba dijo...

Yo no soy muy fan de las apariciones ni de las visiones, pero hay una especialmente que por la claridad de sus visiones retrata muy bien lo que está ocurriendo. Me refiero a A.C.Emmerick. Lean y miren si les suena de algo:

... se guardaba silencio sobre la cruz, sobre el sacrificio y la satisfacción, sobre el mérito y el pecado, donde los hechos, los milagros y los misterios de la historia de nuestra redención debían dejar paso a «profundas teorías de la revelación», donde el hombre-Dios, para ser soportado, sólo debía ser presentado como «el amigo de los hombres, de los niños, de los pescadores», donde su vida no tenía valor más que como «enseñanza», su Pasión como «ejemplo de virtud», su muerte como «caridad» sin objeto; donde se le quitaba al pueblo creyente el antiguo catecismo que se reemplazaba por «historias bíblicas» donde la falta total de doctrina debía de ser velada bajo «un lenguaje ingenuo al alcanza de todas las inteligencias»; donde los fieles estaban forzados a «cambiar todos sus libros de piedad», sus viejas formulas de plegaria y sus antiguos cánticos por producciones de fábrica moderna «tan malas y tan impías» como aquellas por las que se intentaba reemplazar el misal, el breviario y el ritual. (AA.II.415)

Hay más...

Anónimo dijo...

Francamente, don Terzio, el comentario del tal Wanderer no me gusta nada, porque deja sin distinguir la mediocridad de un argentino concreto, asunto puramente accidental, de lo que él llama "mediocridad argentina", que adquiere en la expresión indiferenciada el carácter de un rasgo nacional. En todo caso, que cada cual hable por sí mismo.
El Bergoglio que conocimos aquí, en Buenos Aires, como ordinario del lugar es ante todo el resultado de la mediocridad e indiferencia de la jerarquía romana, que lo elevó a una dignidad que no conllevaba para quienes lo postularon ningún interés especial. Los obispos para la Argentina no han sido jamás una prioridad para el Vaticano, como prueba la inmensa cantidad de incompetentes que poblaron esa jerarquía en los últimos 100 años.
No existe la tal "mediocridad argentina", al menos como rasgo común de un pueblo, como sugiere el comentario. Bergoglio no es más o menos elevado que el resto de "eminencias" que han desbarrancado a la Iglesia a su actual estado de casi extinción en los últimos 50 años.
Y no quiero recordar al último papa polaco, para no dar pruebas odiosas de mi afirmación; ni a los extraordinariamente atorrantes (palabra muy argentina si las hay) obispos alemanes, holandeses y de otras regiones hiperbóreas de los últimos años, cuya responsabilidad en la creciente e indetenible vulgarización de la Iglesia es ampliamente conocida.
Bergoglio, o Francisco, no es precisamente una elección en la cual podamos coincidir fácilmente los argentinos -y aunque para algunos suponga esta afirmación ponerse en crisis con la "iluminación" del Espíritu Santo, que inspira a los concilios y los cónclaves que a los modernistas les vienen bien- pero sobre todo, el hombre tiene muy poco de argentino típico, aunque se pueda aceptar que proporcionó a los argentinos uno de los raros episodios de alegría nacional de los últimos años.
Pero eso no ha sido mérito propio, ni mediocridad ni genialidad del protagonista, sino una especie de compensación vicaria del Cielo para con mi sufrido pueblo.
Gracias
L. b-C.

MIGUEL25 dijo...

«¡Este es el mayor peligro! –dijo–; cuando la Iglesia se vuelve mundana, cuando tiene dentro de sí el espíritu del mundo, cuando esa paz que no es la del Señor–la paz que Jesús dice: ‘La paz os dejo, mi paz os doy’, no como el mundo la da–; (sino) cuando tiene la paz terrenal, la Iglesia es una Iglesia débil, una Iglesia a la que se le ganó y es incapaz de traer el Evangelio, el mensaje de la Cruz, el escándalo de la Cruz... No lo puede llevar adelante si es mundana

( Su Santidad el Papa Francisco en la misa celebrada en la capilla de la Casa Santa Marta)

Ooooléeee. ya era hora, ..por fin, el Papa, dice lo que tropecientas veces se ha dicho desde la FSSPX, y llevamos repitiendo por activa y por pasiva los tradicionalistas..

Efectivamente, por lo menos reconoce la enfermedad de hoy de la Iglesia SU MUNDANIZACIÓN, una IGLESIA DEL MUNDO Y PARA EL MUNDO, DEL HOMBRE Y PARA EL HOMBRE una Iglesia incapaz de transmitir el Evangelio y que predica a un Cristo sin Cruz.

Como primer paso no está mal, que un enfermo de VATICANOSEGUNDITIS, reconozca la enfermedad de la Iglesia no está mal...y que sea el Vicario de Cristo, el que lo reconoce, ...!!victoria¡¡..

Ahora falta que reconozca quien fue el causante de este mal, que no fue otro sino Satanás, que se sentó en el Concilio Vaticano II, que ni siquiera fue bueno, que éste, fue LA RUINA DE LA FE CATOLICA, y UNA CALAMIDAD para la Iglesia, y que en parte fue obra del infierno.

Falta además, que reconozca la medicina para sanar a la Iglesia, que es la REVISIÓN DEL CONCILIO VATICANO II, A LA LUZ DE LA TRADICIÓN, empleando el MAGISTERIO INFALIBLE. Como Vicario de Cristo lo puede hacer bien mediante un MAGISTERIO "EX CATHEDRA", bien mediante la convocatoria de un CONCILIO DOGMATICO-DOCTRINAL que como todos sabemos produce siempre un magisterio infalible.

Así procede Jesucristo con su Iglesia, El nos dijo "no tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos", "no he venido a llamar a los justos sino a los pecadores" y San Pablo enseña, que "donde abundó el pecado sobreabundó la Gracia".

Pues bien, es en la Iglesia postconciliar mundanizada, ciega de modernismo-neoprotestantismo, donde Cristo obra su curación a través de su Vicario con el fin de que la Iglesia regrese a la Tradición.

La otra parte de la Iglesia, la FSSPX y los tradicionalistas, ya también por gracia, nos hemos liberado del nefasto Concilio Vaticano II, y de su mundanización por lo que estando sanos no tenemos necesidad de médico.

Bien por el Papa Francisco:

reconoce la NECESIDAD DE LA GRACIA:

«Encomendar al Señor la Iglesia, es una oración que hace crecer la Iglesia. Es también un acto de fe; no podemos hacer nada, somos siervos pobres–todos–, de la Iglesia: Él es quien puede mantenerla en marcha y hacerla crecer, hacerla santa, defender, protegerla del príncipe de este mundo y de lo que él quiere que la Iglesia se convierta: en más y más mundana», (alertó el Papa).


Terzio dijo...

No entiendo el caso como efecto de las circunstancias socio-culturales-nacionales: Se trata de los defectos de toda una generación de 'hombres de iglesia' deformados en y por el post-concilio, en América y en Europa, en Argentina, en España, en Alemania y en sus respectivas antípodas. Bergoglio-Francisco sólo es, digamos, el epifenómeno.

'

AMDG dijo...

Más claro aún, Terzio:

Rocíame con el hisopo: quedaré limpio;
lávame: quedaré más blanco que la nieve

http://www.franciscanos.org/oracion/salmo050.htm

¿Un papa que cuestiona la Escritura? O al menos que remueve las aguas para hacerlas más oscuras. Lo que hay que oír y encima va de humilde.

Es obvio que debe de haber usado muy poco el hisopo.

Sobre la foto. Me parece que es el Per ipsum et cum ipso et in ipso Creo que es el celebrante el que alza la patena al menos.

Estar con lo dedos entrecruzados, gesto piadoso, se queda corto delante del Cristo y Sangre de Cristo.

El careto que pone el papa y el celebrante de a su derecha (nuestra izquierda) no hacen nada por expresar a la audiencia que creen que están alzando a Cristo.

En fin.

Tulkas dijo...

Bergoglio es menos malo que cualquiera de los actuales cardenales españoles.

Esto debe de ser otra "compensación vicaria del Cielo", supongo, pero para con España.

Wamba dijo...

Sobre la elección de Bergoglio aquí les dejo una serie de artículos bastante interesantes:

http://radiocristiandad.wordpress.com/2013/04/03/osko-usted-cree-en-las-casualidades/

http://www.telesurtv.net/articulos/2013/04/18/john-kerry-considera-a-latinoamerica-el-patio-trasero-de-estados-unidos-1243.html

http://vaticaninsider.lastampa.it/index.php?id=48&L=2&tx_ttnews%5Btt_news%5D=23240&tx_ttnews%5Bswords%5D=&cHash=dd71a1034f

Aquí está todo milimétricamente calculado de antemano. Derechitos hacia el NWO.

P. Mateo dijo...

yo no hable de ¨mediocridad¨al referirme al Papa... sino de decadencia, una decadencia ue inicio con el falso ëspiritu del concilio¨... mis respetos para la Iglesia de Argentina.. si creo en los descuidos de la Curia que no escoge de lo mejor en el sentido CATOLICO. lo que veo y con tristeza es un NO a la hermeneutica de la continuidad, un NO a la predicacion clara de la doctrina, en cambio un SI a mas de lo mismo. Muchos sacerdotes y seminaristas jovenes estamos tristes por esto, extraño y en muy poco tiempo lo que Benedicto XVI regalo a nuestra Iglesia y ahora se esta desmantelando...

Terzio dijo...

Sorry, Wamba, pero no admito enlaces al blog infecto del pajarraco ese.

En Málaga ocurre lo que en el resto de España; que se publiquen heterodoxias en una página diocesana es bastante común. Sucede porque los prelados mantienen a ciertos deformadores con todos sus honores, sin inquietarlos ni tocarles un pelo:

- porque no quieren complicarse la vida

- porque en el fondo piensan quasi como ellos

Ni más, ni menos.

'

Wamba dijo...

Entendido D. Terzio. Tampoco soy del parecer de la cigüeña. Mi propósito fue dar a conocer la noticia, cosa que como usted bien dice, a estas alturas extrañarse de eso es no saber en que mundo vivimos. Aquí está el enlace original si usted desea leerlo:
http://www.diocesismalaga.es/index.php?mod=content&secc=view&id=2013042904

Terzio dijo...

Gracias, Wamba. El artículo es un destilado de la peor cristología modernista, del estilo neo-arriano crítico-historicista que pulula en los libelos de Pagola, por ejemplo. Ese lenguaje es el típico que se suele usar en reuniones de arciprestazgo, en comunidades de base etc. Seguro que habrá miles como ese en circulación.

Las Hermandades, como se fían de los curas, se tragan toda esa ponzoña, que les daña bastante, aunque menos que el estrago que causan en curas, frailes y monjas que son los más afectados.

Se trata, ni más ni menos, de demoler el Credo cristiano (el católico ya lo han demolido).

'

Anónimo dijo...

Además, don Terzio, si Francisco es algo propio de la "mediocridad argentina", no me quiero ni imaginar lo que será la mediocridad de los cardenales del cónclave que lo eligió ...
Aurelio