miércoles, 12 de septiembre de 2007

Credo de ánima


Un co-blogero me ha involucrado en una interesante conversación super ánima. Aunque entiendo el blog más como expansión que como estudio (que no excluyo), no me resisto ante ciertas exquisitas ocasiones (debilidad? pedantería? proclividad? vocación? tutto insieme?...)

Así que transporto a propósito, y aporto esto que pudiera ser un "credo sobre el alma"; no es original mio: Son los enunciados-tesis del index systemáticus (VI-d) del Denzinger - Enchiridium Symbolorum, Herder, Friburg. MCMLIII.

Lo asumo absolutamente, con la admiración de su concentrada ciencia, hoy tan extraña por ausente en donde y en quienes tanto la precisan; va en el latín original, para que desistan los no aptos y se esfuercen los que pueden (si pueden, deben), además de por fidelidad y estética, por estimular la lingua.


Ánima humana:
- Non est pars divinae sustanciae aut unum quid cum Verbo;
- nec increata vel increábilis,

- sed creatur a Deo,

- ex nihilo;

- non praeexsistit;

- non generatur a paréntibus;

- neque a sensitiva evolvitur ad intellectivam;

- est substantia;

- non unam in omnibus,

- sed in síngulis una;

- iam ante partum infusa;

- non est naturáliter aut bona, aut mala.

- Ánima est rationalis et intellectualis;

- sed non est ipsa únicum obiectum evidentis cognictionis;

- est inmortalis;

- unítur cum corpore non accidentáliter,

- sed est córporis forma vere per se et essentiáliter;

- est praedita libertate;

- quae libertas probari potest tum ex Escriptura,

- tum ratione.

Completo en la referencia, el texto remite con este epígrafe (entre paréntesis) a otro capítulo del Index para ampliar sobre

(De ánima separata v. Ind XIV a et b ) -->Deus Consummator .


Si en mi mano estuviera, sería de obligado estudio y explayación no sólo donde se debe y no se hace, sino en otros centros y áulas de formación, necesariamente y sin excusa.

Y otro gallo cantaría...
.
Pienso.
.
&.


2 comentarios:

Joaquín dijo...

Muy oportuno. ¿Dónde hay que firmar?

Por eso el teólogo Josef Ratzinger en Ratisbona (1967), aunque propone una definición de alma que no guarda semejanza alguna con la aristotélico-tomista, se guarda bien de conservar el término tradicional "alma".

Seguiremos explayándonos...

Anónimo dijo...

¡Menudo shock!

Yo que entraba suponiendo otro membrillo, o un Caruso, me encuentro en mitad de una quaestio disputata, toma ya!

Y como no tengo edad, ni ciencia, ni sapiencia...hago mutis por el foro y dejo a los sapientes con el alma y el ente.

Ea!

Tu Tente.