miércoles, 8 de diciembre de 2010

8 de Diciembre


Me despertaron los cañonazos que daban en los cuarteles de la Plaza de España, con los cristales viejos de las viejas ventanas trepidando, chorreando una fina humedad casi escarchada, brillante y limpia. Retumbaba todo el palacio.

Recien vestido, con el abrigo por los hombros y una bufanda encima, salí del cuarto y anduve de prisa el pasillo hasta el deambulatorio, delante de la capilla. El oratorio tenía ese olor frío, mañanero, a incienso de la tarde antes y a cera de la lamparilla, cálida y parpadeante, consumiéndose, invitando a rezar con su lengua de fuego, pequeña almenara de gracia.

A lo lejos, desde el jardín, se oía una campana volteada, y al poco las campanadas profundas del reloj de la Catedral, más claras, en el medio silencio del dia de fiesta, sin el rumor habitual de la ciudad activa.

Los mirlos cantaban y hacían eco desde el lindero del parque; se veían algunos gorriones por el ventanal de la capilla, piando y saltando con vuelos cortos desde el tejaroz a la reja baja del balconcillo. La neblina fina dejaba ver la tapia y el castillete del guarda, junto a la cancela que daba al río.

A mitad del rezo me prendí del responsorio, que estuve musitando un rato:

"...Dios Todopoderoso me ciñe de valor..."

y luego volví a la antífona de los perfumes:

"Trahe nos, Virgo immaculáta, post te currémus in odórem unguentórum tuórum"

Otra vez las campanadas solemnes del reloj de la Giralda; y al punto un repique de fiesta de todo el campanario.

Antes de salir, de rodillas, delante de la imagen de la Inmaculada, dije la oración con la que me vestían en casa, yo un chiquillo, sobre la tarima, con el brasero humeando alhucema. Me hacían la señal de la cruz y rezaban:

Bendito y alabado sea
el Santísimo Sacramento del Altar
y la pura y limpia concepción
de María Santísima, nuestra Señora,
concebida sin mancha de pecado original
desde el primer instante de su ser natural,
y Asunta en cuerpo y alma a la Gloria Celestial.
Amén.


Y yo, con boca de niño, medio dormido, sin saber qué decía, decía ¡Amén! al Misterio, tan entrañable que se vivía entre nosotros, mil veces contemplado, con olor y calor de casa.

Y ahora y siempre, por los siglos de los siglos.

Amén.


+T.

domingo, 5 de diciembre de 2010

Cardenal Maradiaga: Alarmantes noticias!

Si ustedes tiene el gusto de seguir los articuletes de este blog, habrán advertido que aparecen feroces comentaristas (de ambos sexos) que se irritan y arman la marimorena si se le toca un pelo a un cardenal...dependiendo del cardenal que sea. Conque les brindo nueva distracción porque este articulete es de crítica cardenalicia.

El Emmº y Revmº en cuestión es de esos que me remueven la bilis y la atrabilis nada más verle y/o nombrarle y/o citarle. No le reí la gracia cuando se enredó de manera tan chusca en el golpe de Tegucigalpa y metió la pata cardenalicia hasta la faja, quedando en evidencia y patente exposición, muy arriesgada, que se procuró salvar como se pudo, pero que le dejó tocado del ala, muy señalado. Después le amenazaron; dicen que sigue amenazado y esa es una de las razones que se barajan para señalarlo como un probable candidato para ocupar un importante Dicasterio en Roma (el de religiosos), en la Curia Vaticana.


No me gusta ver amenazado a un obispo, sea de dónde sea, por lo que sea y el obispo que sea. Se comenta que tienen que sacar de Honduras al Cardenal Rodriguez Maradiaga por razones de seguridad; también (y eso se comenta menos) para que no empeore y se complique la situación de la Iglesia en Honduras. Mucho menos se dice que la peligrosa situación en que se encuentra el primado hondureño se debe, en gran parte, a su torpe implicación en los asuntos de la política del país. Si al final se le acomoda en Roma, sería un nuevo casus del célebre y muy socorrido promoveatur ut removeatur. Si lo exige la tranquilidad de la Iglesia en Honduras, lo comprendo. No comprendo, sin embargo, que se le instale en un puesto importante y que pase a ser uno de los Cardenales de Curia con señalado y reconocido peso por razón del sillón curial que vaya a ocupar.

De Rodriguez Maradiaga retengo, como dije más arriba, aquella estampa tan chocante que dejó en Sevilla. En un articulete que escribí a la sazón, comentaba esto:


Del Sr. Cardenal Rodriguez Maradiaga tengo una imagen muy equívoca, un flash, una impresión. Somos de la generación audiovisual y padecemos sus limitaciones además de gozar sus ventajas. La estampa que me "configuró" al Sr. Cardenal fue una foto (con poca distribución) que le hicieron hará un par de veranos, por estas fechas, aproximadamente...

...Le invitaron a visitar la sede de una conocida Cofradía sevillana...

...Acostumbrados al Sr. Cardenal de Sevilla, los señores hermanos de la Junta de Gobierno de la Hdª esperaban que la visita privada, no de protocolo, del Sr. Cardenal de Honduras fuera, más o menos, como las del Sr. Cardenal local cuando se digna visitar o ser visitado...

...Pero los señores cofrades se quedaron mudos y de una pieza cuando llega el Sr. Cardenal de Tegucigalpa-Honduras vistiendo una camiseta blanca de algodón, unos pantalones corrientes y unas zapatillas cómodas. Tal cual.

En Sevilla, esas cosas ni se pasan por alto ni se olvidan. Al poco, la prensa cofradiera daba cuenta de la pobrísima y decepcionante impresión causada por aquel Cardenal des-purpurado y en camiseta de deporte.

Moraleja: El reverenciable que no se guarda reverencia a sí mismo, no merece la reverencia que se le debe..


Como empecé diciendo, el flash de Rodriguez Maradiaga en camiseta me "impresionó", aunque yo ya tenía hecho mi concepto, lo confieso.

Un "papable" centroamericano como está, ha estado y seguirá estando Centroamérica, es una burbuja inconsistente que apenas puede ser más que eso.

No sé si el presentarle como "papable" en el Cónclave fué ocurrencia de la prensa o interesada "opinión" creada por esa "progresía" oficial eclesiástica que suele tener dos o tres mascarones en su proa de vanguardia. No sé. Pero siempre opiné con fatal prejuicio (?) del Maradiaga "papable". La camiseta me lo confirmó.

Y su politiqueo hondureño y lo que haya tenido que ver Maradiaga en lo de Honduras, me lo confirma. Como lo de la camiseta. Al día, la "situación" de Maradiaga cada vez se sostiene menos. Se ha confirmado como un cardenal que en vez de ayudar a la Iglesia "complica" a la Iglesia. Y de manera bastante "torpe".

Se demuestra que el cardenal hondureño no es un príncipe purpurado fino y florentino de aquellos que tramaban conjuras en el siglo de los Médici. Evidentemente. Usar camiseta deportiva y no moiré de seda imprime carácter, también es patente. Así que con Martini quasi-chocheando y Maradiaga "implicado", el escuadrón de la vanguardia cardenalicia está tocado, muy tocado.

Lo que no me explico es cómo, si son "inteligentes", pudieron hacerse "ilusiones" con uno y con otro (aunque no le hubieran visto en camiseta).

n.b. En la fotito, su eminencia Rodriguez Maradiaga es el tercero por la izquierda, con guayabera (y camiseta) blanca. Y en la foto de arriba, posando con el hermano mayor de la Cofradía sevillana a la que visitó des-purpurado y encamisetado "como un costalero en ensayo" comentaba un pie de foto

Ya digo que conservo esa impresión minimalista del Cardenal. Cuando lo cacareaban como papable, yo me echaba a temblar. Si ahora es cierto que se lo llevan a Roma, tampoco me quedo tranquilo. A no ser que en Roma sea neutralizado, que es otra sutilísima forma de des-problematizar a la romana: En un dicasterio romano, si el Cardenal no es de primera, con capacidad y competencia y auxiliares competentes y capaces, el purpurado puede quedar reducido a ser un señor vestido de grana que firma y que preside actos y que sale en las fotos. Y poco más.

Si ese fuera a ser el destino de Maradiaga, vale, ok, va bene. Pero si va a Roma para ser promocionado y dejar que le hagan mascarón de proa de la progresía, malo, muy malo.

En sus actuaciones como prelado hondureño, ha demostrado que no tiene cualidades. Confiarle encargos más altos, me parece un error.

Conste que no juzgo méritos personales, ni virtudes (que se las presumo, of course). Sólo me atengo a los hechos.

Y a la camiseta (lo reconozco).


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Rodriguez Maradiaga en su avispero

Me parece que es un indiscreto. Una de las peores cosas que puede ser un hombre de Iglesia de su status. Se espera de una jerarca reconocido que administre prudentemente sus "posibilidades", ya sean influencias directas, ya indirectas. También ponderación, justa y equilibrada ponderación. Y "distancia" de hechos cuando los hechos son turbios. La política es turbia, y la política centroamericana-caribeña es un turbión desde que en aquellas latitudes hubo actividad política.

lo del grameen bank y su dire



Tengo una mente tan incapaz para la economía y sus enredos como mi bisabuelo, mi abuelo y mi padre, tres ruindades económicas. Por eso no sé entrar en detalles ni en gráficos, sólo me impacta la noticia:

Las tripas rotas del Grameen Bank. Yunus: Un nóbel malo

Y me extraña que no se publique en titulares, porque si se confirma la sospecha, el escándalo sería un verdadero escándalo global. Un escándalo insospechado, sorprendente, desolador para la gente que veía en ese gran proyecto-sistema del micro-crédito un recurso viable para sacar de pobres a la gente más desfavorecida del Tercer Mundo.

Cuando te dicen que el fundador-gestor del Grameen Bank ha desviado a cuentas personales millones de euros entregados para el sostenimiento de los micro-créditos, pasas en un momento de la perplejidad al desengaño, como suele suceder con estas noticias. Pero el tortazo se vuelve estupor repugnante cuando lees que se están induciendo suicidios como recurso último para poder cobrar pólizas de seguros que cubran la ruína de las familias afectadas.

El artículo de Il Foglio dice, más o menos, esto:

Yunus, el banquero bueno que obtuvo el Nobel, se revela ahora como un villano.

Ironía del destino es que desde Noruega, donde fue gratificado en 2006 con el Nobel de la Paz, vengan noticias sobre serios problemas que involucran al septuagenario bengalés Muhammad Yunus, el “banquero de los pobres”, el inventor del microcrédito santificado por un Occidente con perpetuo sentimiento de culpa, el hombre que hace más de treinta años prometió: “Un día nuestros nietos irán a los museos para ver qué era la pobreza”.

Antes de visitar los museos, nuestros nietos han podido ver en nuestro tiempo una investigación televisiva del periodista danés Tom Heinemann, emitido el martes pasado en Noruega e intitulada “Atrapado en el microcrédito”. En el documental, Yunus es acusado de haber usado para fines distintos a los inicialmente previstos buena parte de una donación recibida por su banco de pobres, equivalente a 74,5 millones de euros y concedidos entre 1996 y 1998 por países como Noruega, Suecia, Holanda y Alemania. En vez de quedar en el Grameen Bank para financiar acciones de microcrédito, una cifra igual a 47 millones de euros pasó por allí brevemente, antes de terminar en la caja de Grameen Kalyan, otra sociedad propiedad de Yunus e que se ocupa de “microseguros” de salud.

Frente a las denuncias oficiales del embajador noruego en Dhaka, así como de la Agencia Noruega de Cooperación para el Desarrollo y del Ministro de Finanzas de Bangladesh, Yunus dijo que la operación tuvo motivos fiscales y restituyó 17,6 millones de libras (unos 20 millones de euros) al Grameen Bank. La historia, sin embargo, conserva aspectos oscuros, y el mismo banco, después de la emisión del documental noruego, ha anunciado una explicación completa “lo antes posible”.

Se evapora así, sin gloria, la aureola milagrosa entorno al sistema entero del microcrédito, ahora acusado desde muchos frentes—también de él habló ayer el Financial Times, con toda una página intitulada “Pequeño préstamo, gran problema”—por parecerse a una forma organizada de usura bajo el velo de la corrección política. Ahora “transformadas en un negocio global que vincula las finanzas internacionales con algunas de las comunidades más pobres del mundo”, como dice el FT, las microfinanzas se basan en tasas de interés que llegan al 30%. Tasas usurarias, justificadas por el hecho de que sólo así es posible prestar dinero a personas que, debido a su indigencia, no serían atendidas por un banco normal. Un “sistema de explotación de seres humanos, cruel como el nazismo y basado únicamente en criterios de rentabilidad”, acusa el activista de derechos humanos indio Lenin Raghunvashi, con agentes remunerados en función del número de clientes y de la tasa de recaudación, e incitados a impulsar los préstamos, primero, y a forzar la devolución con cualquier medio, después.

El resultado es que, en los últimos dos meses, unos cincuenta suicidios en las zonas más pobres de la India están con toda seguridad vinculados a la práctica de los pequeños préstamos sin garantía. Los mismos agentes encargados de recaudar los pagos semanales llegaron a sugerir el suicidio a los insolventes para cobrar la indemnización del fondo de protección que interviene en caso de muerte del deudor. Las Naciones Unidas no dejaron pasar la ocasión (¿y cómo podrían?) de declarar 2005 como el “Año del Microcrédito”. Sólo cinco años después, el “benefactor” está desnudo
.

He tomado el link y la traducción del artículo de la interesante página de La Liga Distribuitista, que retoma en el siglo XXI post-marxista las ideas de Hilaire Belloc y Chesterton, inspiradas en la Rerum Novarum. Una propuesta, entonces y ahora, digna de atención y consideración. Por lo menos debería ensayarse a una escala mayor, ya que sólo puede presentar un muestrario bastante corto.

Realizar un proyecto de esa naturaleza sería, por comparar, como la batalla de un liliputiense contra un mega-gigante, por el enorme desnivel/desproporción de medios entre los eventuales antagonistas. Con una particularidad digna de destacarse y subrayar: El pequeñito está súper-sano y el gigantón es un híper-enfermo capaz de infectar y transmitir tumores y podredumbre a todo el que se le arrime y/o conviva con él.

Que es lo que ha pasado - supongo - con el Grameen Bank: Malas gestiones, malas compañías, grandes sumas, grandes proyectos, oportunidades, veleidades, tentaciones, una mala hora...etc. Es decir, esa serie de circunstancias que propician cosas así.

El final de la noticia de Il Foglio, esos suicidios inducidos como "recurso económico" a la desesperada, me ha dado escalofríos. Quizá, en este caso, se combinan el imparable mecanismo del sistema más las ambiciones y delirios personales con una falta de espíritu cristiano y de "disciplina de la caridad", rematando en esos patéticos resultados. De todas formas, me dan pena estos derrumbes que tienen como secuela tantas pequeñas tragedias.

Pero la corrupción del Grameen Bank y su fundador-inventor-jefe me hace reflexionar sobre otras cuestiones, preguntarme sobre cosas. Por ejemplo: ¿Se imaginan Uds. el escándalo y la movida medíatica si este leñazo del Grameen Bank hubiera sucedido en una institución de la Iglesia (la Iglesia Católica, claro, que es la única que sale en los papeles)? ¿Se imaginan las noticias de prensa-radio-tv-internet? ¿Se hacen idea?

Pero no pasa nada si es el Grameen Bank y su fundador-dueño es el sospechoso y presunto autor de trincar de la caja y meterse en el bolsillo los millonazos de las subveciones etc. etc. etc.


Los malos no pasan una a los buenos que caen; pisotearán y cocearán al caido hasta triturarlo y molerlo; si es cristiano, si es católico, si es cura, obispo, cardenal o papa, la saña del ataque será diabólica. Pero si el batacazo se lo pega un amigo de los malos, tiene quasi asegurada la impunidad, el silencio, la cobertura , el capote, la media luz y la luz apagada.

n.b. Los malos son los anti-católicos, los laicistas, neo-paganos, neo-rojerío, alianzistas-civilizacionistas y demás canalla & cía & friends & boys & girls & simpatizantes. Todos esos (y esas).

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jueves, 2 de diciembre de 2010

Letanías de Adviento a Cristo el Esperado


Tomadas de un devocional de principios del s. XVII (Fasciculus Sacrarum Orationum et Lithaniarum ad usum quotidianum), son estas Letanías a Cristo para el tiempo de Adviento:


~ LETANÍAS PARA EL TIEMPO DE ADVIENTO ~


Señor, ten piedad.
Cristo, ten piedad.
Señor, ten piedad.


Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos.


Dios Padre Celestial,
R. Ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo,
R. Ten misericordia de nosotros.
Dios Espíritu Santo,
R. Ten misericordia de nosotros.
Santa Trinidad, un solo Dios,
R. Ten misericordia de nosotros.


- Verbo de Dios, por quien todas las cosas ha sido hechas,
R. Ten misericordia de nosotros.
Palabra hecha carne,
R. Ten misericordia de nosotros.
Mesías prometido en la Ley,
R. Ten misericordia de nosotros.
Prefigurado por místicos milagros,
R. Ten misericordia de nosotros.
Predicho por los Profetas,
R. Ten misericordia de nosotros.
Anunciado por Ángeles,
R. Ten misericordia de nosotros.
Deseado por los Reyes,
R. Ten misericordia de nosotros.
Anhelado por las naciones,
R. Ten misericordia de nosotros.
Enviado al mundo por el Padre,
R. Ten misericordia de nosotros.
Concebido por el Espíritu Santo,
R. Ten misericordia de nosotros.
Sabiduría enviada desde el trono de la gloria de Dios,
R. Ten misericordia de nosotros.
Deseo de los collados eternos,
R. Ten misericordia de nosotros.
Rocío en el vellocino de Gedeón,
R. Ten misericordia de nosotros.
Zarza ardiente en fuego incombustible,
R. Ten misericordia de nosotros.
Escala de Jacob,
R. Ten misericordia de nosotros.
Flor de la raíz de Jesé,
R. Ten misericordia de nosotros.
Flor de la vara de Aarón,
R. Ten misericordia de nosotros.
Flor que aparece en nuestra tierra,
R. Ten misericordia de nosotros.
Olor de campo bendecido por Dios,
R. Ten misericordia de nosotros.
Timiama de suavísimo olor sobre altar de oro,
R. Ten misericordia de nosotros.
Nardo y cinamomo en huerto cerrado,
R. Ten misericordia de nosotros.
Sello puesto sobre el corazón,
R. Ten misericordia de nosotros.
Piedra mortal desprendida sin intervención de mano alguna,
R. Ten misericordia de nosotros.
Agua saludable sacada del pozo de Belén,
R. Ten misericordia de nosotros.
Nuevo vino en nuevo odre,
R. Ten misericordia de nosotros.
Agua viva que fluye como torrente desde el Líbano,
R. Ten misericordia de nosotros.
Árbol de la Vida plantado en medio del Paraíso,
R. Ten misericordia de nosotros.
Fuente que mana del Paraíso,
R. Ten misericordia de nosotros.
Agua de la vida en fuente sellada,
R. Ten misericordia de nosotros.
Lámpara puesta sobre candelabro purísimo,
R. Ten misericordia de nosotros.
Estrella de Jacob,
R. Ten misericordia de nosotros.
Cetro de Israel,
R. Ten misericordia de nosotros.
Sol del que está vestida la Mujer,
R. Ten misericordia de nosotros.
Varón rondado por la mujer,
R. Ten misericordia de nosotros.
Verdad que brota de la tierra,
R. Ten misericordia de nosotros.
Justicia que desciende del Cielo,
R. Ten misericordia de nosotros.
Salvador que pasa por la puerta cerrada,
R. Ten misericordia de nosotros.
Príncipe sentado en la puerta oriental,
R. Ten misericordia de nosotros.
Linaje de la mujer que aplasta la cabeza de la serpiente,
R. Ten misericordia de nosotros.
Progenie de Abraham por la cual son bendecidas todas las naciones,
R. Ten misericordia de nosotros.
Salvación y esperanza,
R. Ten misericordia de nosotros.
Emmanuel nuestro,
R. Ten misericordia de nosotros.


- Muéstrate propicio,
R. perdónanos, Señor.
Muéstrate propicio,
R. escúchanos, Señor.
Muéstrate propicio,
R. líbranos Señor.

- De todo mal,
R. líbranos Señor.
De todo pecado,
R. líbranos Señor.
De un corazón duro y perverso,
R. líbranos Señor.
De toda costumbre malvada,
R. líbranos Señor.
De toda pasión desordenada,
R. líbranos Señor.
De toda aspereza de costumbres,
R. líbranos Señor.
De toda malicia e indolencia,
R. líbranos Señor.
De una mala y eterna muerte,
R. líbranos Señor.
Por tu predestinación desde toda la eternidad,
R. líbranos Señor.
Por tu advenimiento,
R. líbranos Señor.
Por el misterio de tu santa Encarnación,
R. líbranos Señor.
Por tu virginal e inmaculada concepción,
R. líbranos Señor.
Por la fe y la obediencia de la gloriosa Virgen,
R. líbranos Señor.
Por la virginal fecundidad de tu Santísima Madre,
R. líbranos Señor.
Por la plenitud de gracia comunicada a tu Madre,
R. líbranos Señor.
En el día del Juicio,
R. líbranos Señor.


- Nosotros pecadores,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes salvarnos de nuestros pecados,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes dirigir a Ti todas nuestras acciones,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes hacer que tengamos para Ti nuestra morada preparada,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes rellenar con tu gracia todo valle de pusilanimidad,
R. te rogamos, óyenos.
Que nos concedas gozarnos siempre en Ti y glorificarte,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes mirar nuestra humildad y extender sobre nosotros el brazo de tu poder,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes colmarnos a nosotros, pobres, de tus bienes,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes hacer de nosotros coherederos de tu reino,
R. te rogamos, óyenos.
Que te dignes atendernos,
R. te rogamos, óyenos.
Hijo de Dios,
R. te rogamos, óyenos.


- Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,
R. perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,
R. escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo,
R. ten misericordia de nosotros.


- Cristo, óyenos.
Cristo, escúchanos.


- Señor, ten piedad.
Cristo, ten piedad.
Señor, ten piedad
.


- Padre nuestro…

- Ven a liberarnos, Señor, Dios de las Virtudes.
R. Muéstranos tu rostro y seremos salvos.
Acuérdate de nosotros, Señor, como el pueblo de tu beneplácito.
R. Visítanos con tu salvación.
Muéstranos, Señor, tu misericordia.
R. Y danos tu salvación.


- Señor, escucha nuestra oración.
R. Y llegue a Ti nuestro clamor.


Oremos.

Excita, Señor, tu poder y ven, para que con tu protección merezcamos vernos libres de los inminentes peligros de nuestros pecados y con tu gracia podamos salvarnos.
Purifica, Señor, nuestras conciencias visitándolas, para que tu Hijo Jesucristo, Señor Nuestro, encuentre en nosostros al venir una morada preparada para Él.

Oh Dios, que sabes que nuestra humana fragilidad no puede subsistir a tantos peligros como nos acechan, danos salud de alma y de cuerpo para que, con tu ayuda, podamos superar los sufrimientos por nuestros pecados.

Todopoderoso e indulgente Dios, sé propicio a nuestras plegarias y libra nuestros corazones de las tentaciones de malos pensamientos para que merezcamos convertirnos en digna morada del Espíritu Santo.

Concede, te rogamos, Dios Todopoderoso, que los sagrados misterios de nuestra redención nos otorguen los auxilios necesarios a la vida presente y nos alcancen los premios de la bienaventuranza eterna. Por Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos.

Amén.


V. Señor, escucha mi oración.
R. Y llegue a Ti mi clamor.
V. Bendigamos al Señor.
R. Demos gracias a Dios.

V. Y las almas de los fieles difuntos por la misericordia de Dios descansen en paz.
R. Amén.

El original está en latín; el que quiera, puede rezarlas en esta página (en la columna de la dchª, está la traducción en inglés con el versículo de la Escritura del que se ha extraído la invocación litánica):


Litaniae ad Christum ex Scriptura Sacra in Adventu


Son preciosas. Uno de esos ejercicios piadosos que antiguamente se rezaban durante los oficios vespertinos, delante del Santísimo expuesto. Un mundo de piedad que desapareció con las innovaciones litúrgicas.

En estas y otras prácticas piadosas es notable la forma implícita de catequesis, una manera de formar/instruir rezando que, desgraciadamente, no se valoró lo suficiente, al contrario.

Entre un rezo modernistizante y esta letanía, la distancia es semejante a la que va de un Coral de Bach a una estridencia rockera.

Sin duda, hay que tener gusto, formación y sentido espirtual para escoger lo bueno y tirar lo malo. La pena es ver cuánto malo corre por ahí con olvido, desprecio y/o desconocimiento de lo bueno.


+T.

lunes, 29 de noviembre de 2010

El carnaval del Cardenal Ranjith


El recien purpurado Arzobispo de Colombo, Malcolm, Cardenal Ranjith, ha sido recibido con una parafernalia la mar de pinturera. Y él, parece, muy gustoso:

Vean el reportaje en la web. del Arzobispado de Colombo, Ceilán


¿Qué tal? ¿Repuestos del golpe??


Yo pienso que esto no favorece un pelo a la imagen del Cardenal Ranjith. A quien, de entrada, por ser un reconocido prelado tradicional, le profesamos una cordial simpatía. Pero, después de esto, ya no sé qué decir.

Lo confieso.

p.s. Un yotube con la carroza en moviento, y otros particulares de lo mismo.

+T.

Adviento ~ 1


¿Cuánto queda de noche, cuánto?
¿Cuánta noche queda, cuánta?

Se me echan encima los años
de niebla, de sombra.
Despertar sin despunte,
pereza de horas, de tiempo,
que pasa, que pesa.

¡Centinela! ¿Cuánta noche falta?

En el velo de un sueño sin alba,
la bruma tan fría, la escarcha,
el crujido del tiempo
y el corazón temiendo
más noche, más niebla.

¡Atalaya! ¿Cuánta noche?

Arden almenaras,
lejanas, las cumbres ardientes,
lucientes, brillantes,
que son en la noche
venturas en luz de horizonte.

Y el alma se prende en ardores,
suspiros del Sol que no llega,
amores que rompen en queja
y dejan cenizas que lloran
lágrimas que enfrían
las nieblas, las brisas, las noches.

¡Estrella! ¡Qué bella es la noche!
Díle que pare su cielo,
que orbite en detente,
firme en su vía,
quieta en su centro.

¡Estrella! ¡Que bella es tu noche!
Que te da fondo de oscuro celaje
para que rutilen las chispas de gloria
que enciendan las ansias
que prendan las almas
y suban ligeras en mil remolinos
de efímeras luces,
punzadas de anhelo sin colmo.

¡Qué profunda es la noche!

Yo pido pupilas de prístina vista,
voz de clamor que nunca enmudezca,
ver más allá de nieblas y noches,
y gritar con salterio de estrellas,
avisando que llega
el lucero de la madrugada
con dulces clarores
de día.

Custos, quid de nocte?
Custos, quid de nocte?



+T.

jueves, 25 de noviembre de 2010

"...que lo blanco que yo veo, creer que es negro, si la Iglesia hierárchica assí lo determina..."


El imprevisible comentario del Papa sobre el preservativo ha sido un bombazo. Y resulta patética la tropa de doctores queriendo explicar que todo sigue igual. Por ese agujerito en la trama terminará pasando el elefante, sólo es cuestión de tiempo. A no ser que se remache con toda contundencia y claridad la doctrina que se había mantenido hasta ahora.

He dicho doctrina y reconozco que me siento incómodo al utilizar ese término referido a algo tan chocante como los profilácticos y su uso. Es verdad que la moral desciende hasta rincones, vericuetos y sótanos la mar de sórdidos. Tiene que pisar esos bajos por razón de su cometido, se comprende. Pero, como decía aquella respuesta comodín del Catecismo, "doctores tiene la Iglesia que le sabrán responder". Y así debe ser.

En el hospital, al enfermo, uno le examina en consulta, otro le hace radiografías, está el anestesista que anestesia, el cirujano que opera y así hasta el ats que pone las inyecciones y el auxiliar de clínica que retira y limpia la bacinilla del paciente. ¿Tiene que ser el cirujano el que haga esto? No. No sólo no está obligado sino que sería una actividad poco adecuada para la asepsia y la extrema higiene que debe guardar un médico de quirófano. ¿Me siguen?

¿Por qué el Papa tiene que bajar a tratar esas cuestiones? ¿Por qué lo hizo en aquel viaje a África y repite ahora en esa entrevista-libro? Sin entrar a discutir la distancia entre una y otra ocasión y lo que dijo entonces y lo que dice ahora, sólo recalco su desconcertante efecto. Ha transcurrido muy poco tiempo para alterar lo que se dijo de forma tan llamativa con esta nueva declaración.

Antes y ahora, pienso que no debería haber hablado. Por ese principio de subsidiareidad que tantas veces se trae a colación: ¿No hay nadie para que hable de eso, si hay que hablar? Y que hable con toda la competencia que se pueda. Y si hubiera que dejar cuestiones opinables, temas abiertos, dígase también claramente. Pero, por favor, que no sea el Papa.

Después están las formas, como comenté en el articulete anterior. Las formas importan mucho porque son las que definen el valor de una doctrina, cuando se trata de temas de fe y/o moral. Unas palabras ante unos periodistas en un avión, no son la forma adecuada para exponer doctrina; una respuesta a un periodista que hace una entrevista, tampoco. Se trata del Papa, y el Papa, cuando habla de ciertas cosas que le competen especialmente, debe hacerlo con toda formalidad. O abastenerse de hablar.

Una consideración más: ¿A quién dirige esa respuesta? Hay niveles de interlocución/expresión/exposición. ¿Se ha tratado, ha sido, de una respuesta ad casum, al peridiosta Seeweld en concreto, sin más alcance? Porque de hecho ese es el marco circunstancial interpersonal de esa entrevista. De entrada no se le debería dar o entender más proyección, más alcance.

Es muy característicamente papal la expresión Urbi et Orbi, que se aplica a ciertos actos del Stº Padre en cuanto cabeza de la Iglesia de Roma y de la Iglesia Católica. El Papa, algunas veces, cuando bendice, cuando enseña, cuando predica, lo hace dirigiéndose Urbi et Orbi, a toda Roma y al mundo entero. Circunstancia que, en absoluto, parece ser la de la entrevista y lo que se recoge en ella. ¿O sí? Porque si fuera así debería advertirse. Que el libro-entrevista de Seewald se vaya a publicar en los principales idiomas en uso es otro detalle a tener en cuenta. Un detalle no ignorado, probablemente previsto.

Confieso que, personalmente, no me definiría como un rigorista moral. He conocido - de vez en cuando lo recuerdo - los años en que no ponerse el velo en la Iglesia era un grave pecado para las mujeres, lo mismo que llevar o no llevar determinadas prendas de vestir. Y, en otro sentido, sobre otros usos y costumbres, también he conocido el tiempo en que se llevaban a rajatabla, de forma muy estricta, prácticas tan serias como las de la abstinencia y el ayuno, hoy casi desaparecidas en muchos sitios; me refiero incluso al ayuno eucarístico, tan olvidado. Si a mis abuelos les hubieran contado que los obispos iban a dispensar el ayuno y la abstinencia del Viernes Santo, no se hubieran creído tamaño escándalo, que sin embargo ocurre. Y otros por el estilo que Uds. mismos podrán poner como ejemplo.

¿Pasará, más tarde o temprano, lo mismo con los preservativos? A saber. El reconocimiento del uso de los medios naturales de control de la fertilidad dentro del matrimonio, en tiempos de Pio XII, significó para algunos un paso en determinada dirección, algo que después quedó bien aclarado en la gran Humanae Vitae. Con el comentario de la entrevista deberíamos ir entendiendo que quizá, que posiblemente, que probablemente haya habido cierta reconsideración de algunos particulares, que supondrán novedad. Esa es la conclusión que se saca de todo esto que comento. Pero en materia tan delicada que implica temas tan fundamentales, cualquier paso que implique novedad sobre la anterior doctrina es muy grave.

Yo insisto en la poca claridad, y la poca formalidad.



Al final de los Ejercicios Espirituales, como un corolario práctico destinado a los ejercitantes, San Ignacio de Loyola incluye unas famosas y muy claras reglas para sentire cum Ecclesia. La regla decimotercera siempre me ha llamado poderosamente la atención; dice esto:

13ª regla. Debemos siempre tener para en todo acertar, que lo blanco que yo veo, creer que es negro, si la Iglesia hierárchica assí lo determina, creyendo que entre Christo nuestro Señor, esposo, y la Iglesia su esposa, es el mismo spíritu que nos gobierna y rige para la salud de nuestras ánimas, porque por el mismo Spíritu y Señor nuestro, que dio los diez Mandamientos, es regida y gobernada nuestra sancta madre Iglesia.
Supone una fe íntegra en la Iglesia como Misterio. Y, como dice el mismo texto, en la Jerarquía, es decir, fundamental y pricipalmente en el Papa, que cuando enseña requiere una obsequiosa obediencia a la doctrina que expone. Unos conceptos para encajarlos bien en una fe bien formada, perfeccionada, fuerte, como la del Ignacio de Loyola que escribió esas reglas.

Por supuesto, profeso y mantengo ese ideal. Así debe ser.

Pero esa contundente y recia regla ignaciana implica y exige claridad por parte de la Jerarquía.

Si hay que exponer de nuevo lo que antes se había enseñado de otra manera, que se haga, que se diga. Sin ambages.

Y, por favor, que no sea un comentario a unos periodistas, ni una respuesta a un entrevistador: Que lo diga quien tenga que decirlo, donde deba de decirlo, y de la forma que se deba de decir.

Por el bien de algo tan importante como la Fe.


+T.