jueves, 31 de diciembre de 2020

Te Deum de cabo de año



Demos gracias por lo bienes
y por los males pidamos
elevemos nuestras manos
y nuestros ojos al cielo.
Recordemos a los buenos,
oremos también por los malos,
que todos en bien crezcamos
y no nos empeoremos.
Con confianza imploremos
para todos mejoría,
y la súplica acompañemos
rezando un Ave María.


Y mejor - si lo sabemos -
al Dios Clemente recemos
agradecidos, Te Deum: 


Te Deum laudamus: te Dominum confitemur.

Te æternum Patrem omnis terra veneratur.

Tibi omnes Angeli, tibi Cæli, et universæ Potestates: Tibi Cherubim et Seraphim incessabili voce proclamant: Sanctus, Sanctus, Sanctus Dominus Deus Sabaoth.

Pleni sunt cæli et terra majestatis gloriæ tuæ.

Te gloriosus Apostolorum chorus, Te Prophetarum laudabilis numerus, Te Martyrum candidatus laudat exercitus.

Te per orbem terrarum sancta confitetur Ecclesia, Patrem immensæ majestatis: Venerandum tuum verum et unicum Filium: Sanctum quoque Paraclitum Spiritum. Tu Rex gloriæ, Christe.

Tu Patris sempiternus es Filius, Tu, ad liberandum suscepturus hominem, non horruisti Virginis uterum.

Tu, devicto mortis aculeo, aperuisti credentibus regna cælorum. Tu ad dexteram, Dei sedes, in gloria Patris. Iudex crederis esse venturus.

(los versículos siguientes se rezan de rodillas)

Te ergo quæsumus, tuis famulis subveni, quos pretioso sanguine redemisti.

Æterna fac cum Sanctis tuis in gloria munerari.

Salvum fac populum tuum, Domine, et benedic hereditati tuæ.

Et rege eos, et extolle illos usque in æternum.

Per singulos dies benedicimus te; Et laudamus Nomen tuum in sæculum, et in sæculum sæculi.

Dignare, Domine, die isto sine peccato nos custodire.

Miserere nostri domine, miserere nostri.

Fiat misericordia tua, Domine, super nos, quemadmodum speravimus in te.

In te, Domine, speravi: non confundar in æternum.

V. Benedicamus Patrem, et Filium, cum Sancto Spiritu.

R. Laudemus, et superexaltemus eum in sæcula.

V. Benedictus es, Domine, in firmamento cæli.

R. Et laudabilis, et gloriosus, et superexaltatus in sæcula.

V. Domine, exaudis orationem meam.

R. Et clamor meus ad te veniat.

V. Dominus vobiscum.

R. Et cum spiritu tuo.

Oremus.
Deus, cujus misericordiæ non est numerus, et bonitatis infinitus est thesaurus: piissimæ maiestati tuæ pro collatis donis gratias agimus, tuam semper clementiam exorantes; ut, qui petentibus postulata concedis, eosdem non deserens, ad præmia futura disponas. Per Christum Dominum nostrum. Amen



+T.



viernes, 25 de diciembre de 2020

Villancico 2

 


Jesùs bendito,
Rey de los Cielos,
desde el pesebre
danos consuelo.
Jesùs el Hijo
del Padre Eterno
y de la Virgen,
danos remedio.
Jesùs dulcìsimo,
Redentor nuestro,
mira a tus fieles,
guarda a tu pueblo.
A Tì den gloria
todos los reinos.
+T.

jueves, 24 de diciembre de 2020

Villancico 1

                                                                                                                                 

 
Caminito de Belèn
montada en un borriquillo
iba la Virgen María;
tira del burro José.
Sobre ellos - no se ven -
mil Arcángeles adoran
al Hijo Eterno, Enmanuel,
que del seno de su Madre
ya muy pronto va a nacer.
Lo que los Àngeles saben
serà algùn día la fe
ùnica que salva al mundo
y da al hombre eterno bien.
Venid, creed y adorad
al Dios que en Marìa late
siendo eterno e inmortal.
+T.

martes, 8 de diciembre de 2020

Pura y limpia Concepción




B
endita la gracia sea 
 de tu completa pureza 
 que vence con tu limpieza 
 y en el cielo y tierra ondea 
Tus pies pisando la luna 
 besan Arcángeles bellos 
 mas ninguno de entre ellos 
 igualan tu Concepción 
 ni a tu electa aparición 
 ganan al par en destellos.
 Ruega a Dios que con aquellos
 cantémoste un día nos.

+T.
  

sábado, 21 de noviembre de 2020

Niña Maria




P
resentan Joaquin y Ana
 su Niña al Templo de Dios
 y se llena la mansiòn 
sagrada de luz divina 
que envuelve limpia a Maria 
alumbrando su candor. 
Y es tanta y tal su pureza 
que aromas de flor trasmina 
la Niña mientras camina 
subiendo la escala en pos 
de Aquel que a consagraciòn 
su cuerpo y su alma anima 
inmaculando a esta hija 
que se reviste de sol 
sobre peana de luna 
y coronada de estrellas 
reluce tan pulcra y bella 
hoy que es su Presentaciòn.

Ruega, celestial Princesa, 
benigna al Señor por nos.

Ex voto

+T.

jueves, 29 de octubre de 2020

De Rainiero Cantalamessa

Por casualidad, un compadre me ha avisado de la promociòn en un blog muy leìdo por catòlico-perplejos, de una oportunista ediciòn en castellano de no sè què obras del recièn nominado cardenal emèrito\no elector Rainiero Cantalamessa , todo trapo, sòlo pùrpura y capelo, sin màs funciòn que la pompa y la repompa, un trampantojo màs de entre los muchos embelecos post-vaticanosecundistas. 

Casualmente, sin muchas ganas de bloggear - confièsolo - dada la penuria de que, por mor de la temàtica de EX ORBE, bloggear hoy dìa es armar guerra contra los disparates vaticanos y su capo di tutti capi, cosa que me repugna, pero como muestra del tiempo presente, para que conste, copio y pego para quienes pasen por aquì y quieran leer, un testimonio que me ha parecido prìstino, publicado en el blog de Marco Tosatti y que es esta breve admoniciòn sobre el susodicho Cantalamessa, neo cardenal francisquista de bambolla y birrete estèril. Ahi va: 

  Estimado Tosatti: El padre Raniero Cantalamessa, de 85 años, es uno de los 13 cardenales que serán creados en el Consistorio el 28 de noviembre por Bergoglio. El padre Cantalamessa es franciscano, capuchino, fue profesor de historia del cristianismo en la Cattolica de Milán. Durante 40 años, es decir, desde 1980, ha sido predicador de la Casa Papal. San Juan Pablo II lo eligió, Benedicto XVI lo confirmó, Bergoglio lo “transformó”. 
 El padre Cantalamessa es un ejemplo, sobre el que reflexionar, de cómo Bergoglio puede transformar a un santo y hacer declaraciones sorprendentes precisamente a un santo. El padre Cantalamessa escribió una alabanza a María Madre de Dios, a quien definió como "María, espejo de la Iglesia"; escribió en el '97 una sublime suma teológica de exaltación del Espíritu Santo comentando sobre el  Veni Creator. Persona carismática, encantadora y conductora. Luego, en 2015, con el Papa Bergoglio, en el tercer sermón de Adviento a la Curia Romana, esperando un acercamiento entre católicos y protestantes, explicó que un obstáculo estaría representado por nuestra devoción "imprudente" a la Virgen. Literalmente dijo que era necesario tomar otro camino: "Este camino pasa por un reconocimiento sincero por parte de los católicos de que muchas veces, especialmente en los últimos siglos, hemos contribuido a hacer inaceptable a María para nuestros hermanos protestantes, honrándola de una manera a veces exagerada y imprudente y, sobre todo, por no situar dicha devoción en un marco bíblico muy claro que mostrase su papel subordinado respecto a la Palabra de Dios, al Espíritu Santo y al mismo Jesús ”. De acuerdo con las consideraciones de Bergoglio sobre la Virgen . 
Conociendo personalmente al Padre Raniero, leyendo lo que se informó, me sorprendió, luego me indigné, luego prevaleció la tristeza. Nunca hubiera dicho esto con Juan Pablo II o Benedicto XVI, nunca. También porque estoy seguro de que ella piensa lo contrario, es decir, que Nuestra Señora no ha sido suficientemente honrada y escuchada. 
 Al leer que será nombrado cardenal, he luchado por mortificar los consecuentes pensamientos sobre él. ¿Sabía Bergoglio transformar a un santo? Esta es la pregunta que me hago. Huelga decir que los invito a rezar por el padre Cantalamessa, también a rezar para que rechacen la cita.

 Mons. ICS 

 Y nada màs: Ecce pàjaro! 

Que Uds. se mantengan catòlicamente bien y no se infecten ni con el covid19 ni con el virus encapsulado de los libritos de Cantalamessa. Que los compren y los lean otros.

+T.

lunes, 6 de enero de 2020

Reyes soñados


Sueño cada año cuando llega Enero
con los sueños de niño en mi lecho
mullido y suave, con olores viejos
de dulce alhucema y blando colchón,
oyendo, muy lento, rezar el Rosario
un murmullo con gracia de ensalmo
para adormecerme con avemarías
y las letanías y el Kyrie eleison.
Los ojos cerrados, soñando se iban
las santamarías como un eco suave
de fina oración, sutil, soñolienta,
rutina inocente de infancia creyente,
pureza dichosa que celan Querubes,
custodios celestes de lo que los niños le rezan a Dios.

En aquellas noches aún se escuchaba
el canto del gallo desde algún corral
y alguna lechuza volando, ululando,
y también los gatos con su maullar.
Parecía entonces la noche más fría
y la guata de lana cálida cubría
envolviendo el sueño que otra vez volvía,
el roce en el rostro de su cobertor..
Si arreciaba el viento temblaban vibrando
los finos cristales de los ventanales del alto salón;
si llovía se oía la lluvia goteando desde el tejadillo
de zinc y pizarra del amplio balcón.
...Y el sueño seguía y en la madrugada,
se oía de la torre el son del reloj
con sus campanadas: Las horas, los cuartos,
las medias, tres cuartos y otra vez la hora con repetición.

...Aquella mañana bien amanecía,
mejor que otro día,
con el sol radiante por blanca ilusión.
Los niños del sueño se desperezaban
los ojos brillantes, el pecho anhelante,
llegaban corriendo al solemne salón
sembrado de dulces, de globos, de cuentos,
tambores, trompetas, castillos, muñecas,
trompos, saltadores, pitos, bicicletas,
pepones, peluches, pelotas, roscones,
cien soldaditos de plomo y latón...

...Hoy cuado recuerdo los días de Reyes
de aquella mi infancia que viví feliz,
su dicha inocente con su luz dorada
retorna y amable se recrea en mí.


+T.