Siempre es buena hora para entonar un Te Deum. Pero hay días señalados en que se debe, y hoy debo yo y ahí va:
He dudado entre unos cuantos de mi predilección, pero he escogido este. Los franceses del Grand Siècle tienen una probada gracia para los tedeums. Verbigracia este tan "bailable", con su trompetería y tamborrada, rutilante como la corte du Roi Soleil. Oh!
Et moi aussi je chante mon particulier Te Deum (dentro de lo que cabe que un Te Deum sea "privado", si me explico).
Y repetimos: Ahora sólo la fanfarria inicial, más sonora y un tanto piú "maestosa" que la del youtube anterior. Con la vinajera y el pie de candelabro y la punta de un cornijal recien servido (la voz con la letra del himno la pongo yo (y Uds. conmigo si quieren acompañarme, con mucho gusto, of course)).
+T.