viernes, 28 de febrero de 2014

...Y lo que va a seguir pasando


Hace poco oí hablar del 'horizonte veinte-veinte'. Es una expresión para referirse al futuro año (Deo volente) 2020, un término usado en la jerga de economistas, sociólogos, analistas, etc. para referirse al nivel de progreso que se alcanzará al final de esta década, dentro de seis años.

Pensando en la Iglesia, desde esta inquietante Roma francisquista, el horizonte veinte-veinte católico se vislumbra calamitoso, católicamente considerado. La tendencia de la deriva se describe muy bien con esta escena que los noticiarios eclesiásticos no han puesto en portada, pero que ha sucedido ayer:

El Papa recibe a una delegación de judíos, musulmanes y católicos de Argentina

En titular más pequeño, se informa del alcance y sentido de la audiencia con PP Franciscus:
'Estamos mostrando que las religiones pueden convivir y trabajar juntas y en paz'

No se dice lo que dijo el Papa. Mejor. Si ya hablando Urbi et Orbi resulta, tantas veces, de digestión pesada para el tracto digestivo católico, en petit comité y con paisanos en promiscuidad tri-religiosa, lo que diga probablemente sea fastidiosamente traumático para los oídos católicos. Mejor que no se sepa, pues, lo que dijera.

Pero no nos podemos hacer ilusiones, al contrario. Si en un año se ha ido definiendo así, en el futuro se irá afianzado la tendencia, con consecuencias.

El doble registro seguirá, por su parte, funcionando también: Homilías y alocuciones con un sencillo y sano tono católico, parenético, moralmente positivo, espiritualmente animoso. Y, juntamente, actos, dichos, notas, recibimientos, reconocimientos, aprobaciones implícitas, reprobaciones en tono menor, ausencias, displicencias, nombramientos, promociones...etc. etc. etc. de perfil, tendencia, contenido y consecuencias inconfundiblemente francisquistas.

Si en un año las cosas van así, ¿cómo estarán en el veinte-veinte?



A cada día le basta su fatiga, nos dijo el Señor, ¿por qué agobiarse por el mañana?

Eso me digo yo, me lo repito, lo interiorizo...Y, sin embargo, no dejo de pensar en el 'horizonte veinte-veinte' de la Iglesia.

Y no, precisamente, con serena expectación, Dios nos valga.

EstramboteLa misma noticia, con otros pormenores, y la escalofriante propuesta de una JMJ interreligiosa !!!

Moraleja: Todo es susceptible de ir francisquistamente peor.

¡Válganos Dios!


+T.

Lo que está pasando


En un año, la transformación de la Iglesia en su cabeza visible, que es el Papa, ha desfigurado ante el mundo el rostro del Papa y de la Iglesia. En un doble plano/nivel de recepción, el mundo de masas, la sociedad global, aplaude sin saber, mientras el catolicismo más consciente se alarma cada día, cada semana, cada mes. Llevamos un año alarmados, desde la traumática tarde romana en que el ''Habemus Papam!" suscitó nuestra primera alarma, confirmada in actu, coram Urbe et Orbe, cuando el Papa salió a la logia a bendecir, en aquella extraña y desafortunada escena, plena de detalles de lectura inquietante.

La alarma de hoy ha sido enterarnos del prólogo que el Papa Bergoglio ha escrito para el libro 'Póvera per i póveri'  del Cardenal Prefecto de Doctrina de la Fe, Gerard Müller, que ha sido presentado al público en un acto con Gustavo Gutiérrez en el estrado de honor, junto al Cardenal Maradiaga (*** estoy escribiendo y releyendo con asumida estupefacción lo que acabo de teclear: que el Papa prologa un libro de teología de liberación escrito por el Cardenal Müller, Prefecto de la Congregación que fue, cincuenta años ha, el Santo Oficio, libro que ha sido presentado con G. Gutiérrez como invitado de honor. Ni el más febril íncubo del venerable Ottaviani hubiera delirado una escena semejante).

Tonando entusiasmo, por su parte, la prensa des-católica, exulta y proclama triunfalista: El padre de la Teología de la Liberación, ovacionado en el Vaticano

Un particular subrayable: Aun sabiendo todo el mundo lo que han dicho, hecho y provocado sus cachorros, en mitad del acto de exaltación, el patriarca liberacionista exculpa a sus epígonos, de los que parece sentirse paternalmente ufano:

- Interrogado por Zenit sobre quienes eran los que desviaban la teología de la liberación dándole una matriz marxista, el sacerdote peruano respondió: "No Boff, no Sobrino, no Juan Luis Segundo, no Ronaldo Muñoz, o sea, diría que los teólogos no" y añadió que "claro, hubo gente muy comprometida antes y que tenían una base teológica, pero no eran los que hacían teología".

El caso supera el nivel de la enésima anécdota francisquista por el alcance de su significado implícito. Habiendo sido prelado iberoamericano, PP Franciscus conoce de primera mano la grave responsabilidad de los teólogos de la liberación en la descomposición y degeneración del catolicismo sudamericano, precisamente el continente católico que concentra a la mayor parte de los católicos del mundo. Imaginarnos una América libre de la teología de la liberación, de sus estragos, de sus violencias, es un sueño, una ilusión irrealizable porque el daño está hecho y la cizaña sembrada, crecida y fructificada.

Ahora, además, con el nihil obstat vaticano, con el Cardenal de Doctrina de la Fe apadrinando y el Papa americano aprobando. Libenter, con mucho gusto.

Consciente de que mi desaprobación vale menos que un comino, conste, sin embargo, que no asumo aunque el Papa asuma: Yo no.

Salva reverentia, naturalmente (pero con la sensación de una cada día más lesa reverentia).

Coda:  No comento la foto del 'Trío Calaveras', Maradiaga-Müller-Gutiérrez, porque si no se me volatizaría la reverentia salva, la lesa y la extinta también. Les brindo, pues, libertad de opinión (sin que sirva de precedente).

+T.

miércoles, 26 de febrero de 2014

La carta rogativa





Primeramente, pienso que se está anticipando indiscretamente el Sínodo de la Familia. Segundo, intuyo que pudiera ser que la divulgación fuera muy intencionada. Tercero, temo que el Sínodo ya esté listo y consumado, a falta, solamente, de la puesta en escena final.

La puesta en escena será juanpablista (por la estructura) y francisquista (por el 'estilo' y el protagonista principal). Nihil novum. Lo nuevo será lo que tengan pensado hacer respecto a la pastoral matrimonial, algo tan delicado.

Como cualquier cura, sé muy bien la crisis que el mundo moderno ha supuesto para la familia cristiana. También 'pastoreo' con los muy frecuentes náufragos, y sé cuántos restos de naufragios andan flotando en superficie (como presiento los que no se ven porque están en el fondo, siempre a pique de emerger). No solamente sé estas cosas sino que las trato, unas mejor que otras, por circunstancias y por personas. Hasta tengo encomendado, desde hace bastantes años, un excepcional caso, fruto de una excepcional situación. Todo ello me obliga a practicar una comprensión pastoral muy personalizada y a mantener una predicación de doctrina muy clara y sin ambages.

Conozco las excepciones, pero no puedo reconocer que todo lo que se está preparando sea una simple ambientación para, finalmente, rebajar la doctrina y la moral conyugal-familiar con la excusa del bien pastoral.

Si PP Franciscus pide oraciones, rezaré. Pero no por lo que tengan en mente hacer (o deshacer), sino para que en el Sínodo se vele por la santidad de la familia y se estimule la santificación de los matrimonios cristianos.

Por las rebajas, no rezaré.

Y ya veremos qué pasa en el Sínodo, durante y después. Si habrá fractura, o no.

Ahora estamos, todavía, en el antes de.

Oremus

+T.

viernes, 21 de febrero de 2014

La idolatría del diálogo


La semana pasada, en la lectio continua del leccionario ferial del Misal (n.o.) se completaba la selección de textos del ciclo de David con la narración de los últimos años de Salomón, la caída idolátrica del rey sabio y la profecía de la división del reino. La historia de Salomón es de las más decepcionantes de toda la Sagrada Escritura, un caso de gracia in diminuendo (o de des-gracia in crescendo), con el lamentable decurso inverso desde la prudente juventud, la sabia madurez y el remate de la necia ancianidad:

"...Así, en la vejez de Salomón, sus mujeres les desviaron el corazón hacia otros dioses, y su corazón ya no perteneció íntegramente al Señor, su Dios, como el de su padre David. Salomón fue detrás de Astarté, la diosa de los sidonios, y detrás de Milcóm, el abominable ídolo de los amonitas. Él hizo lo que es malo a los ojos del Señor, y no siguió plenamente al Señor, como lo había hecho su padre David. Fue entonces cuando Salomón erigió, sobre la montaña que está al este de Jerusalén, un lugar alto dedicado a Quemós, el abominable ídolo de Moab, y a Milcóm, el ídolo de los amonitas. Y lo mismo hizo para todas sus mujeres extranjeras, que quemaban incienso y ofrecían sacrificios a sus dioses."
cfr. IºRe 11, 1-10

Hay exegetas que enseñan que se puede rastrear un remoto eco crítico de la degeneración de Salomón en Gn 3. Explican que el relato de la caída acentúa el papel de la mujer en el proceso de la tentación y la inducción a la desobediencia y el pecado. Yo prefiero la lectura más ortodoxa que no discute la secuencia histórica de la composición de los textos, con la reflexión de que Gn 3 enseña/profetiza el prototipo del acto de pecado. Al respecto, puede destacarse que todo se desencadena con un diálogo, el de la mujer con la serpiente.

La degeneración de Salomón y sus mujeres se puede decir que fue también un diálogo al que le siguió una cesión tolerante y que concluyó con la aceptación de los cultos horrendos y su instalación en Jerusalén, cabe al Templo del Señor, en su Ciudad Santa. Desde metros y paradigmas actuales, sin embargo, se ponderaría la apertura de Salomón a la experiencia religiosa de sus mujeres, su apuesta por el diálogo inter-religioso, su tolerancia de las prácticas religiosas extranjeras, el respeto, promoción y vivencia de la libertad religiosa en su reino, definible como un ejemplo admirable de sociedad/estado multi-cultural.

Obviamente, todo esto último supone (supuso) el conflicto con la alianza mosáica y su exclusividad religiosa de credo y culto. El Dios único y verdadero no tolera deidades falsas ni cultos idolátricos.

El 'diálogo', tiene una muy difícil justificación en la Sagrada Escritura. También con lección en contra, la escena de San Pablo en el Areópago de Atenas (Act 17) ilustra un caso de intento de diálogo frustrado y frustrante, decisivo para la consecuente resolución del Apóstol de limitarse a la predicación rigurosa de Cristo.

Cuando el Vat.2º (y el pre-concilio y el post-concilio) insiste en el diálogo como una necesidad, una urgencia, un medio imprescindible, contradice profundas convicciones del Antiguo y el Nuevo Testamento, incluso nos sume en perplejidades alarmantes:

"...Capacítense con insistente afán para participar en el diálogo que hay que entablar con el mundo y con los hombres de cualquier opinión." cfr. LG 43

"...¿Qué debe hacerse para que la intensificación de las relaciones entre las culturas, que debería llevar a un verdadero y fructuoso diálogo entre los diferentes grupos y naciones, no perturbe la vida de las comunidades, no eche por tierra la sabiduría de los antepasados ni ponga en peligro el genio propio de los pueblos?" cfr. LG 56

"...La eficacia en la acción y la necesidad del diálogo piden en nuestra época iniciativas de equipo. Estas asociaciones contribuyen además no poco al desarrollo del sentido universal, sin duda muy apropiado para el católico, y a la formación de una conciencia de la genuina solidaridad y responsabilidad universales." cfr. LG 90

"...La Iglesia, en virtud de la misión que tiene de iluminar a todo el orbe con el mensaje evangélico y de reunir en un solo Espíritu a todos los hombres de cualquier nación, raza o cultura, se convierte en señal de la fraternidad que permite y consolida el diálogo sincero." cfr. LG 92

"...exhorta a sus hijos a que, con prudencia y caridad, mediante el diálogo y colaboración con los adeptos de otras religiones, dando testimonio de fe y vida cristiana, reconozcan, guarden y promuevan aquellos bienes espirituales y morales, así como los valores socio-culturales que en ellos existen." cfr. NA 2

"...Como es, por consiguiente, tan grande el patrimonio espiritual común a cristianos y judíos, este Sagrado Concilio quiere fomentar y recomendar el mutuo conocimiento y aprecio entre ellos, que se consigue sobre todo por medio de los estudios bíblicos y teológicos y con el diálogo fraterno." cfr. NA 4

"...Siendo propio de la Iglesia el establecer diálogo con la sociedad humana dentro de la que vive, los Obispos tienen, ante todo, el deber de llegar a los hombres, buscar y promover el diálogo con ellos." CD 13

"...En este diálogo expone cada uno, por su parte, con toda profundidad la doctrina de su comunión, presentado claramente los caracteres de la misma. Por medio de este diálogo, todos adquieren un conocimiento más auténtico y un aprecio más justo de la doctrina y de la vida de cada comunión." cfr. UR 4

"...De tal diálogo puede incluso esclarecerse más cuál sea la verdadera naturaleza de la Iglesia católica. De esta forma conoceremos mejor el pensamiento de los hermanos separados y nuestra fe aparecerá entre ellos más claramente expresada." cfr. UR 9


Al cabo de 50 largos años de diálogo múltiple y ubícuo, intenso y extenso; aun después de resultados muy desconcertantes y en absoluto favorables para la misión y la evangelización, se continúa insistiendo. Hace unos días, sin ir más lejos, PP Franciscus subrayaba :

"...el valor del diálogo en la educación (...) educar es una gran obra de construcción en constante transformación (...) pues las escuelas católicas también están abiertas a estudiantes no cristianos e incluso no creyentes: A todos, las instituciones educativas católicas ofrecen una propuesta educativa que tiene como objetivo el desarrollo integral de la persona y que responde al derecho de toda persona a tener acceso al saber y al conocimiento. Pero todos están igualmente llamados a ofrecer, con pleno respeto de la libertad de cada individuo y de los métodos del entorno escolar, la propuesta cristiana, es decir, Jesucristo, como sentido de la vida, del cosmos y de la historia." (ver aquí)


Resumiendo la intervención de PP Franciscus en la susodicha ocasión, otra web de noticias extractaba así:

"...el Pontífice destacaba que la educación católica es uno de los retos más importantes que afronta la Iglesia, que trata de poner en práctica la nueva evangelización en un contexto histórico y cultural en constante transformación (...) el Papa ha puesto el ejemplo de Jesús, que "comenzó a predicar las buenas nuevas en Galilea, una ciudad llena de "diferentes razas, culturas y religiones". Por ello, insta a las personas que trabajan en educación a implicarse "en rutas de intercambio educativo y diálogo". Asimismo, ha reconocido "la contribución" que hacen las instituciones religiosas y otras instituciones católicas en el contexto "del pluralismo cultural y religioso

Francisco ha propuesto al examen de los participantes tres aspectos: el valor del diálogo en la educación, la preparación calificada de los formadores y la responsabilidad de las instituciones educativas

"Efectivamente -ha dicho refiriéndose al primer punto-, las escuelas y universidades católicas son frecuentadas por muchos estudiantes no cristianos e incluso no creyentes. Las instituciones católicas ofrecen a todos una propuesta educativa que tiene como objetivo el desarrollo integral de la persona, que responde al derecho de todo ser humano a tener acceso al saber y al conocimiento. Pero, están igualmente llamadas a ofrecer a todos, con pleno respeto a la libertad de cada individuo y de los métodos propios del entorno escolar , la propuesta cristiana, es decir Jesucristo como sentido de la vida , del universo y de la historia. Jesús comenzó a predicar la buena nueva en la "Galilea de los gentiles ", una encrucijada de personas de diferente raza, cultura y religión. Ese contexto es similar en algunos aspectos al mundo de hoy. Los profundos cambios que han llevado a la difusión, cada vez más amplia, de sociedades multiculturales, exigen a cuantos trabajan en la escuela y en la universidad que se involucren en itinerarios educativos de intercambio y diálogo, con una fidelidad valiente e innovadora que sepa favorecer el encuentro de la identidad católica con las diferentes "almas" de la sociedad multicultural". (ver noticia aquí)

En el sentido de la sanatio ad intra que postulamos en Ex Orbe, pienso que lo mejor sería una suspensión radical del diálogo, de todo diálogo exterior, para concentrarse en un examen y reconstitución interior. Si me explico. Más silencio y menos diálogo. Con un portavoz-vocero delegado, nos debería bastar para mantener la suficiente y precisa comunicación. Y poco más. Dirán que deliro, pero el delirio es parte del ser dialogante, más bien.

Acabo ilustrando con dos muestras de los resultados dialogatorios, dos casos locales extrapolables a la globalidad (antes se decía catolicidad) eclesial:

1º.- En una comunicación diocesana, la 'Delegación diocesana de Ecumenismo, Relaciones Interconfesionales y Relación con las Iglesias Católicas Orientales' (sic) nos comentaba a todos (clero y fieles), con entusismo exultante y clímax de admiración, la foto de PP Franciscus almorzando en Stª Marta con los rabinos argentinos: Papa Francisco: Una foto con rabinos que conmueve al mundo

(Y es verdad. Por lo menos a mí me conmocíonó mucho.)

2º.- Al mail de la Parroquia nos llegó hace unos días la invitación-propaganda para un curso de 'danza sagrada'. El invento huele a jesuita, a uno de esos centros de espiritualidad gestionados (directa o indirectamente) por la Compañía (o sus agentes). El anuncio tiene su quid porque carga el anzuelo con el cebo de ofrecer 'espiritualidad':

"...La mayoría de las danzas que se utilizan son en círculo, expresión de la alianza de Dios con su pueblo. El pueblo hebreo tenía la costumbre de danzar y en el Antiguo Testamento hay episodios en los que se alude a la danza al son de diferentes instrumentos. Las primeras comunidades cristianas también mantuvieron durante bastantes décadas esta expresión tan rica del pueblo de Israel." (aquí más detalle in situ)

Frutos, como decía, del dialoguismo. En suma, todo equívoco y confundente.

Se echa de menos una única luz. Con tanto diálogo, por tanto dialogar, sufrimos una multi-iluminación; como en aquellas salas de fiestas de música pop, hay muchos focos, de muchos colores, intermitentes, todos en movimiento, con el complemento de una bolas con mosaico de espejitos y prismas de cristal que reflejan y refraccionan las luces multicolores.

¿Quizá para ver mejor? No, es obvio que no.

...Si me explico.

+T.

domingo, 16 de febrero de 2014

Una arpía que crió Proaño

 
Esa de la foto es la arpía que está detrás de la arremetida de la UNICEF - ONU contra la Iglesia Católica, con la coartada/excusa de los casos de pederastía imputados a clérigos católicos (entrevista en El País)

El estilo, el look, la pose, todo eso que es espejo del alma (las apariencias no engañan) dicen mucho de la sujeta. El personaje es un típico estereotipo, muy común entre los burócratas del engendro monstruoso de la ONU: Una espabilada radical-marxista que templa su furor político-rabioso pero sigue revolucionaria profunda mientras logra una poltrona, una oficina, un nombramiento y un buen sueldo en la ONU. Para justificar la paga se busca una causa, un caso, un expediente...que suele derivar en un pequeño tribunal revolucionario con sentencia dictada premeditada y anticipadamente contra algo/alguien seleccionado con absoluto prejuicio. En este caso particular, esta agente/comisaria cripto-revolucionaria funcionaria de la institución contra-la-infancia llamada Unicef ha escogido como blanco de sus furores a la Iglesia Católica, contra la que mantiene profundos resentimientos, muy violentos, que ella sabrá (?) explicar.

Por la foto, por el look, por cierto desenfado indecente de vieja contestataria que trasluce su poco estética estampa, yo pensé que se trataba de una monja resabiada, con furores frustrados de insatisfacciones femeniles, según otro perfil bastante común entre hembras de esa clase. No sé más, no tengo datos. Pero el buen ojo para la inquisición no me falla: Fue (cuando moza) adepta del insurgente Monseñor Leónidas Proaño, uno de los mascarones-santones de aquel marxismo disfrazado de 'teología' que infectó a toda Hispanoamérica.

En su web, esta activista radical cuenta así el despertar de su conciencia 'social':

"...A los 13 años conocí a Monseñor Leónidas Proaño (...) me uní a su causa para contribuir en la tarea que se había planteado: liberar a los indios de su situación de esclavitud. Durante este periodo participé activamente en los grupos de pastoral juvenil promoviendo la concientización de jóvenes como yo sobre la situación de los indios..."

La funcionaria de Uniceff da cuenta también de su currículum, con toda clase de muestras de lo peor, instituciones, personas, trabajos, lugares; es feminista radical, Cuba es su segunda patria, vomita revolucíon e insurgencia por su boca de vieja desdentada y sus tetas caídas amamantan con leche de hoz y martillo a todo el sector del hemisferio sur que le ha tocado en suerte como campo de su revolucionaria misión de liberación popular. Es decir, es una perfecta arpía de pluma roja y cuerno diabólico en ristre.

Así y todo, en el frontis de su web, reluce una cita de su mentor:

"Durante toda mi vida he luchado por la Verdad, por la Vida, por la Libertad, por la Justicia..."
Mons. Leónidas Proaño

Aquí, por si quieren echarle un vistazo, la web de Sara Oviedo Fierro

Es decir, que esta pieza, esta justiciera funcionaria de la ONU, está maquinando contra la Iglesia Católica desde sus raíces de activista marxista-católica-latinoamericana, como ejemplar discípula militante-nostálgica de Monseñor Proaño (q.e.p.d. A.)

Por eso su bad milk es tan ponzoñosa, tan peligrosa.

Una arpía, resumiendo. Ya lo dice el refrán: Cría arpías y te sacarán los ojos.

Porque el tiempo de los buitres ya pasó.

p.s. No sé por qué, pero intuyo empatías francisquistas en la arpía. Puede ser que me equivoque, pero yo diría que hay feeling. Aunque ya se sabe que arpías, sirenas, esfinges y demás hembras mítico-monstruosas, seducen primero con simpatía para matar mejor después.

p.p.s. ¿Y si Franciscus la nombrara consultora vaticana de algo? Como es hembra, tiene títulos, es anti-clerical, es anti-católica, es pro-vanguardia, es pro-izquierdas, es pro-progreso, es de la ONU...En fin, que ostenta cualidades muy apreciables (francisquistamente hablando, quiero decir).

p.p.p.s. Incluso me atrevería a decir que pudiera ser que fuera amiga de Maradiaga, el de Honduras, ¿no? O si no, le pega serlo.


+T.

viernes, 14 de febrero de 2014

Memoria (poco crítica) de la (muy equívoca y fallida) Sacrosanctum Concilium


Entre los católicos bien formados y conscientes es un clamor que la Sacrosanctum Concilium es uno de los más lamentables y fallidos documentos magisteriales-conciliares de todos los tiempos. Se elaboró intencionadamente abierta a ulteriores plasmaciones que ya maquinaban sus verdaderos diseñadores, al margen y mucho más allá de las intenciones (y suposiciones) de la gran mayoría de los (incautos e ilusos) Padres Conciliares. Es, pues, un documento para estudiar, reflexionar y sacar conclusiones teológico-morales, litúrgico-eclesiales, histórico-dogmáticas...etc. etc. etc. y tomar lección para no incurrir en más error. Pero, verdaderamente, no es un documento que merezca un monumento. Sólo la tribu de viejos liturgistas con resaca conciliar se atreven a aplaudir lo lamentable, seniles vaticanosecundistas embriagados con el espiritoso espíritu del vaticano2º.

Pero hay más considerantes que publican considerandos de difícil equilibrio entre la verdad y la no-verdad (excúsome de explicar que la incompleta verdad no tiene punto de equilibrio posible). Suelen ser monsignorini en pleno currículum curialesco (mal que le pese a PP Franciscus y su vis reformista), que saben muy bien que los excesos de verdad verbal se pagan luego muy caros, y por eso se esfuerzan en alquitarar juicios para no decir verdades como puños, sino proferir generalidades vaporosas de sutil ambivalencia y cómoda insertación poli-ubicable.

A Juan Miguel Ferrer, el secretario de Cañizares en la Congregación de Culto Divino, le tengo gran simpatía porque vale, es un ilustradísimo perito litúrgico, un buen sacerdote y un competente agente curial, bien probado. Le conocí (brevemente) de estudiante en Roma y nunca me ha decepcionado el juicio que me hice de él. Ahora es uno de los mejores secundarios españoles de la Curia Vaticana, el mejor del equipo de Cañizares. Sería una lástima que no accediera a mayores responsabilidades, algo que está en el aire desde la llegada de PP Franciscus (además de los mil rumores del descontento general sobre Cañizares como prefecto de la Congregación).

Pues precisamente, mi admirado Ferrer, con ocasión de un simposio sobre la Sacrosanctum Concilium, lanza esta curialísima sentencia de salón, ad casum:

"No está mal que haya un poco de paz litúrgica y que la Misa sea fuente de reconciliación y de paz, y no campo de guerra para las diferentes sensibilidades eclesiales".
Él susodicho sabrá lo que ha querido decir (y no decir), porque la parida es de viento en popa y escape a toda vela. Considerando su curriculum, comprendemos. Teniendo en cuenta la problemática, no entendemos. No entendemos cómo se pueden decir estas cosas...que comprendemos que se digan. Pero así no adelantamos. Ni se logra pax litúrgica inyectándonos un chute de melíflua bona volumptas panfilista. Sorry por el Monseñor.

Pero la traca de petardos de viento siguió por arte y oficio del rector de la Lateranense, Enrico dal Covolo, que, citando a Romano Guardini (muy estimado por los prelados opinantes del 'centro' equilibrado, siempre una cita de apreciado buen gusto vaticano) decía que  "- La liturgia no dice 'yo', sino 'nostros'...". La cita de Guardini es esta:

"...La liturgia no es obra del individuo, sino de la totalidad de los fieles. Esta totalidad no resulta solo de la suma de las personas que se encuentran en una Iglesia en un determinado momento, y tampoco es la “asamblea” reunida. Más bien se dilata más allá de los límites de un espacio determinado y abraza a todos los creyentes de la tierra. Y supera también los límites del tiempo, puesto que la comunidad que reza en la tierra se siente una sola cosa con los beatos, que viven en la eternidad [...] El sujeto, que cumple la acción litúrgica de la oración, no es el simple total de todos los individuos que participan de una misma fe. Es el conjunto de los fieles, pero cuya unidad tiene un valor autónomo, prescindiendo de la cantidad de los creyentes que la forman: la Iglesia."

Como se ve, otra estupenda cita-de-escape a todo chorro, seguro que muy pensada y repensada y escogida y guardada por Mons. Enrico del Covolo para la ocasión. No se puede esperar menos de un ilmo. mons. rector (magnífico) de la Lateranense.

Pero, me pregunto que si la clave es la 'totalidad', el 'nosotros', la 'comunidad', el 'conjunto' más allá del número, el espacio y el tiempo y todo eso, ¿qué pesa más, todo el ser eclesial de los católicos de todos los siglos pasados que celebraron y participaron una única Misa, con un sólo rito, en unidad litúrgica interna y externa, en comunión de intención y de acción, o la difusa y muy fragmentada comunión propiciada por la Sacrosanctum Concilium y la reforma litúrgica post-conciliar que cumple 50 años, fuente de rupturas y de innovaciones sin límite???

Cuando no se quieren decir las cosas que deberían ser dichas, se dicen cosas que mejor no haber dicho porque no dicen nada pudiendo decir mucho.

Y si hablan expertos en un ambiente de conspicua relevancia, que enseñen bien, claro, con sustancia, y no nos prediquen finas y exquisitas evasivas.

Doctores tuvo la Iglesia que sabían responder. Hoy nuestros doctores parecen caricaturas de aquellos otros doctores y galenos que mientras parloteaban eruditos distingos de rebotica dejaban desfallecer al febril paciente postrado en su lecho.

+T.

Una irreverente ocurrencia (dicen que es práctica del 'hagan lío' francisquista)



Voilá un reverendo imbécil practicando cretinamente una irreverente quasi-profanación:

Lio con el Santísimo en la calle


A un entusiasmado (de esos que - como no nos conocemos - se tiene en la lista de facbk por fortuita contingencia, sorry) se le ha ocurrido poner esta aberrante 'exposición/adoración callejera', considerada por el susodicho como un 'valiente' ejemplo de 'armar lío en la calle', según el lema francisquista.

Yo le comenté que a mí me parece la impía ocurrencia de un insensato, un iluso, un entusiasmado, un descolocado que no sabe el cómo y el dónde de las cosas (¡las cosas santas!) y se lanza a improvisar. También le comenté que me molesta alternar con gente que aplaude la confusión, porque ese acto es confuso y confundente. Es lamentable que no se entienda. Una cosa es verdad (según la admiración del que puso el yutube): Se trata de un golpe agudo de francisquismo, un virus, como se sabe, muy contaminante.

¿No cabría otra posible consideración? Por mi parte, puesto a considerar, pienso aun peor: Sólo a un cretino al borde de la blasfemia se le ocurre llevar en una mochila una custodia con su Majestad (un concepto incomprensible, seguramente, para el memo).

El bobo, además, ha cometido la irreverencia impía no en un arranque frenético de iluminado entusiasta, sino con premeditación y ensayo, puesto que toda la escena está grabada y hay gente presente que se suma pseudo-espontáneamente a la sacra-pantomima. Y al final aplauden.

Supongo que, en consecuente lógica, para proclamar con entusiasmo nuevangelizador la sacramentalidad matrimonial cristiana, tendrán pensado organizar próximamente la consumación de un acto conyugal in loco público idóneo (plaza y jardines). Con más éxito de público y crítica, es de esperar. Y con más aplausos.

¡¡Cuánto cretino suelto y cuánto imbécil abonado en la claque de los entusiastas!! (o 'liantes-francisquistas', es decir: Practicantes del 'hagan lío' francisquil).

Dios quiera que la afección no se desmadre y se vuelva plaga...

p.s. Para colmo, el invento no es original. Vean otro acto igual, más elaborado.

+T.

miércoles, 12 de febrero de 2014

A un año de la tragedia


En el aniversario de la trágica renuncia de Benedicto XVI, reasumo todo lo opinado en su momento, aquel fatídico día. Ha pasado un año y las consecuencias son/han sido mucho peores que lo que entonces temíamos. Si Benedicto marcó un compás de esperanza y regeneración, al fin consumó su pontificado de forma impropia, dejando expuesto el futuro de la Iglesia a los hechos que se sucedieron a causa de su patética renuncia. Con todas las puntualizaciones, incluso críticas, que le hicimos en ExOrbe, el suyo fue un pontificado digno, señalado por el motu proprio Summorum Pontificum, un verdadero hito en el desastroso panorama post-conciliar, motivo de perspectivas restauradoras que a la postre se vieron abocadas a punto muerto por la traumática decisión del abandono de la Santa Sede. Una desgraciada efemérides.

Esto es parte de lo que publicamos entonces aquí, en Ex Orbe:
Es otro gran rifiuto

Divagaciones sobre el retiro

Júbilo indiscreto, regocijo absurdo

Nosotros nos lamentamos, ellos hacen fiesta

Pentimenti di Benedetto

Se va, renuncia, pero con muchos aplausos

El Papa habla al terminar los ejercicios espirituales (un texto verdaderamente patético y emotivo)


Sin embargo, como hace un año, la voz del catolicismo políticamente correcto repite a coro los tópicos que se acuñaron ad casum, ponderando la 'valentía'(?) de la decisión, su responsable(?) oportunidad(?), independencia(?) y premeditada determinación (?). Todos y cada uno de estos asertos me parecen discutibles y sujetos a una duda razonable, por como se plantearon y desenvolvieron las circunstancias previas y posteriores a la renuncia.

Lo que sí reconozco ser verdad es otra de las proclamas tópicas que las más conspícuas voces católicas, oficiales y oficiosas, repiten también a coro, como si estuviera ensayado: Que la renuncia de Benedicto supuso/supone el fin de una época y la apertura de otra nueva. La diferencias es que esos lo dicen con el ya acostumbrado timbre de entusiasmo, mientras yo lo comento con el punto y subrayado de alarma que en verdad merece: Todo ha cambiado y va a seguir cambiando, en un momento de agitación exterior e interior en el que, precisamente, la Iglesia Católica necesita estabilidad y firmeza, si no en el ad extra imprevisible sí, por lo menos, en el ad intra que debería estar celosamente ordenado por nuestra Jerarquía, misión que le compete muy gravemente.

Por contra, en este año transcurrido, todo se ha desenvuelto en la liviandad del aplauso y la anécdota diaria. Los documentos se han vuelto portadas de revista y titulares de prensa. La doctrina de la Sede se ha trocado en charla de micrófono y sermoncillo de ambón parroquial. Hasta hemos visto publicada una encíclica anterior con firma extrapolada y hemos leído, con perplejo estupor, una exhortación apostólica indefinible por extraña, en forma y fondo.

Tantas veces hemos recordado el pasaje de Lc 22, 31ss. apoyándonos en la profecía del Señor y esperando que después de la agitación diabólica el sucesor de Pedro acometiera la urgentemente necesaria confirmación de los fieles y consolidación de la Iglesia entera. Pero ahora tenemos la impresión de haber pasado a otro tremendo tiempo de convulsión, como cuando lanzan en alto el trigo pasándolo de una zaranda a otra.

Sin duda, la criba va a ser intensa y quedará un trigo limpio, muy limpio. Lo que no sé pronosticar es cuánto trigo quedará.

Oremus!

+T.

domingo, 9 de febrero de 2014

Lo de la Infanta

Tener seis horas declarando ante un juez a una Infanta de España, es una clamorosa proclama anti-monárquica perpetrada con muy intencionada pre-determinación. Haber hecho de eso un espectáculo para la plebe, es un crímen de lesa monarquía. Solazarse en el caso entendiéndolo como un acto de justicia democrático-igualitaria, es una mezquindad que, además de dejar insatisfecho a los que exigen satisfacción, les define muy desfavorablemente, según el perfil del populacho más común.

Uno imagina que si los perros no estuvieran sujetos, la escena podría concluir como un remake del linchamiento de la Princesa de Lamballe, o incluso peor. Episodios como el indecente asalto del otro día al Cardenal Rouco no son sino avisos, catas del nivel inmoral de los 'indignados' radicalizados (con o sin tricolor).

No profeso conceptos democráticos; respecto a la justicia legal del sistema, menos. Una atávica conciencia/convicción estamental (no del todo definida) me induce a referir a cada uno a sus coordenadas. Si la hija del rey infringe la ley, que la juzgue y la castigue el rey, o quien ostente esa competencia, sin salir de su estamento. Sobre el juicio de clérigos mantengo lo mismo, tal cual Becket, prácticamente. Y lo propio respecto a los militares (quizá quienes han podido conservar más la justicia interna). Los gremios también tuvieron antaño su justicia particular, y funcionaban muy bien.

De esto que digo, no intento convencer. Pero sólo soporto con reluctancia las opiniones contrarias.

Lo que me resulta más chocante es ver entre los que claman justicia popular para/contra la Infanta a quienes presumen de cabal españolismo con blasonería de rancia tradición, gules, azur, lises, castillos, barras, leones rampantes, plus-ultra, yugos y flechas. He dicho chocante y quizá debí poner repugnante.

Y esta es mi opinión (que contiene otros particulares y matices que no cuento, por pereza, por desgana).

Obviamente, soy consciente de que mi opinión no es popular, ni democrática, ni políticamente correcta.

...Gracias a Dios.

+T.

jueves, 6 de febrero de 2014

Bailando y aplaudiendo mientras nos hundimos (y dialogamos)

 
El hundimiento del Titanic - todo el mundo lo sabe - fue exquisitamente amenizado por la orquesta del magnífico trasatlántico, que no paró de tocar animadas piezas de salón hasta que los propios músicos (y su director) se vieron con el agua al cuello. Es famosa aquella última pieza 'espiritual', que se fue agotando en los violines mientras los pasajeros se helaban en las lanchas salvavidas o se iban ahogando en el sereno océano. Las estrellas en el azul profundo ponían un contrapunto de nítida y remota luz celestial. ¡Qué bonito!...Pero la escena era terrible, no amable.

El grueso cardenal amazónico (un clamoroso mal-nombramiento benedictino) parece que entiende la actualidad de las congregaciones religiosas católicas con esa nota de inconsciencia y entusiasmo satisfecho característica del postconcilio: ¡Qué alegría porque nos hundimos! ¡Celebrémoslo y brindemos todos!

"..Braz de Aviz recordó la alegría de los superiores de las Congregaciones religiosas cuando en su encuentro con el Papa , a fines de Noviembre, Francisco les anunció su voluntad de mantener esta iniciativa: -"Recuerdo la explosión de alegría de todos los que estaban presentes, y también recuerdo que uno de los superiores generales lo dijo: -' El Papa nos ha unido como hermanos de una misma familia y nos dijo las cosas como si estuviéramos en casa ". Una forma muy bonita de expresar la confianza y todo lo que sentimos en aquel momento. "

Vuelve, pues, el triunfalismo de los mejores tiempos juanpablistas, y tendremos un 2015 monopolizado por el entusiasmo desbordante de los religiosos y las religiosas de la Iglesia Católica. Los religiosos y las religiosas que son una de las llagas infectas y supurantes de la Iglesia Católica, quizá la parte más enferma y descompuesta de la Iglesia Católica post-conciliar, que se afirma en esa extraña y demente forma de vivir la 'alegría cristiana': A más decrepitud, más exultación.

Mientras tanto, entre el jolgorio frívolo de los consagrados, el leitmotiv vuelve a ser el diálogo con el mundo, como el Vat.2º quiso y la actual Jerarquía sigue insistiendo y promoviendo a todos los niveles (y desniveles), la actualidad golpea terca con la realidad de los hechos. Por ejemplo, este que afecta muy particularmente a la 'vida religiosa': La ONU exige al Vaticano que entregue a la justicia a los curas pederastas .

Discúlpenme por poner el enlace al artículo canalla de la prensa impía y blasfema, pero a veces es preferible que sea el enemigo quien nos abofetee el rostro, con más irreverente impacto, para que nos hagamos cargo y sintamos cuánto duele lo que nos debe doler.

Así, el rostro de la Iglesia post-conciliar, en plena borrachera del colocón francisquista, es una rostro golpeado, abofeteado, herido, escupido, mancillado...pero sonriente, que rie sin parar a carcajadas y enseña la boca partida, deforme, una mueca grotesca con los dientes rotos. Y escupe sangre cuando ríe. Pero aplaude, salta y brinca como una patética caricatura burlesca de sí misma, preparándose para un gran baile de máscaras religiosas, el próximo 2015, Deo volente.

Cuando los religiosos, en los tiempos de la verdadera religión, reflexionaban gravemente sobre la vida consagrada, postulaban reforma de vida. Y la reforma significaba conversión. Y la conversión quería decir penitencia. Y la penitencia - por gracia de Dios - tenía como fruto la santidad. Así, con este proceso, se reformaron en su momento las congregaciones religiosas.

Pero la vida religiosa consagrada post-conciliar no es penitente, sino dialogante. Se han abierto al mundo y el mundo ha inundado la vida espiritual de las congregaciones, que han perdido su identidad y se han conformado con la actualidad más común. Según la voluntad del V.2º se han 'aggiornato', se han puesto al día. Con todas las consecuencias. La consecuencia mayor ha sido la pérdida de la esencia religiosa.

Bajo un Papa que vivió su vocación religiosa en una de las congregaciones más descompuestas e infectantes del post-concilio (la más pionera, la más vanguardista, la más profundamente desidentificada, la más influyente), ¿podemos esperar una gloriosa penitencia reformadora? ¿O sufriremos otra ola de dialoguismo, con aventuras a periferias y extra-radios?

Hace poco nos advertían en una circular de Vicaría General de los riesgos de la 'terapia reiki'. Como el yoga, el eneagrama y otros recursos y medios extravagantes de pseudo-espiritualidad, ya pueden Uds. suponer quienes han sido los propagadores de todo eso. De ser especialistas en marxismo (años '60), los reverendos pp de la S.I. han pasado a ser expertos en orientalismos (desde los '80 al presente).

Vean este Programa de actividades en el Centro Arrupe

Es del año 2006. Ofrece, además del reiki, otros fascinantes 'ejercicios espirituales' como la danzaterapia, el análisis transaccional, la asertividad y el focusing. Si esa era la oferta de la Compañía en los años de Benedicto, me pregunto estremecido cual será la propuesta ahora, viviendo en pleno furor francisquista.

Pronto se cumplirá un año de francisquismo. Desde entonces vivimos un régimen de entusiasmo que tiende a perpetuarse en 'estado', con permanencia.

Personalmente, no veo signos efectivos de reparación. Todo lo contrario: Asistimos a un derrumbe con banda sonora de risas y aplausos. En la vida religiosa, muy particularmente. Con el barrunto de que el año de los religiosos, el 2015, traerá más de lo mismo. Más ruina, es decir.

p.s. Los ultra-cretino-católicos sedevacantistas y demás fenómenos de la monstruosidad degenerada del extremo opuesto, también aplauden, también ríen, también hacen fiesta, y se imaginan que en el cómic apocalíptico que les emboba ellos son los lectores y no están en la página. Además de ilusos perplejos, tontos de baba maliciosos. Otro cuadro.

+T.

domingo, 2 de febrero de 2014

Candelaria


María, más que pura, va a purificarse

al Templo con su Hijo que presenta al Padre,

la Esposa del Espíritu, la Virgen y Madre.


En un canastillo

llevaba José

un par de pichones

que iba a ofrecer.


Simeón el anciano,

piadoso y orante,

toma al Niño en brazos

y bendice a Dios:


- 'Ahora, Señor, como prometiste,

he visto la Luz que al mundo ha venido,

que es tu Salvador, el que Tú mandaste,

gloria del pueblo que en Tí confió.

Bien puedo salir, Señor, de esta vida,

que ha sido cumplida ya mi expectación.'


Y dijo a la Madre con voz de profeta:

- ' Mira que tu Hijo un signo será,

todos ante Él habrán de juzgarse

y una espada el alma te traspasará'.


Ana la viuda, hija de Fanuel,

dice profecías del Niño también:

Bendice al Señor con santa alegría

por haber colmado su mucha vejez

y tener la dicha de ver al Mesías.


La Virgen María guardaba en su pecho

lo que le predijo el viejo Simeón.

El Niño a su Madre tendió una mirada

y su alma en gozo divino exultó.

En la Gloria cantan Arcángeles bellos

a la Virgen Pura que al mundo Luz dió.

Mientras Ella acuna en su puro seno

el sueño de su hijo, el Hijo de Dios.



+T.