jueves, 24 de abril de 2014
Francisqueos
Después de estar toda la mañana viendo passim la noticia de la doña argentina malcasada telefoneada por PP Franciscus, al fin, por la noche, me encuentro también con la noticia en Zenith: Francisco invita a volver a la Iglesia a una casada con un divorciado.
Si leen Uds. la noticia, tendrán la sensación de estar leyendo la crónica recortada-interpolada de un reality show, con dimes y diretes y fuentes cruzadas. Lo repugnante es el hecho (de fondo) tratado de esa forma (informal). Pero semejante fulaneo es el tipo de presentación que merece tal enredo. Al fin, la historieta con su presentación, nudo y desenlace, parece una escena de tele-comedia con punto religioso, desorden moral-familiar, y marco melodramático (sin excluir comicidad).
Lo grave es toparse (de nuevo) con la realidad: Que desde que comenzó todo, todo lo de PP Francisco es así. Lamentablemente.
Si la noticia según la (oficiosa) agencia Zenith suena así, huele a eso, y parece ser aquello, es porque padecemos una 'comunicación francisquista' que es así, se manifiesta (continuamente) así y se expresa y difunde (congruentemente) así. No es absurdo, tiene su lógica, su coherencia interna, circunscrita en el mismo estilo del autor/inspirador; su idiosincrasia, digamos..
Por lo que se viene a concluir que nada, entonces, es casual, ni improvisado, ni espontáneo, sino que todo está pensado, premeditado, intencionado. Y ahí quedó, en el aire, como una emisión más de ondas francisquistas, difundiéndose por el éter de los medios de comunicación global, todo el mundo enterándose, comentando, opinando...y haciendo lio. El lio es un medio pastoral nuevangelizador netamente francisquista, ya se sabe.
En una (otra) entrevista a Monseñor Ganswëin (aquí en original alemán / aquí una traducción al español), parece latir un sordo descontento, una decepción no confesada, contenida, cortésmente disimulada, en este servicial prelado sujeto a dos fidelidades tan difícilmente gestionables con sinceridad integral. No se puede servir a dos amos, dixit Dominus, y se nota en las suavemente chirriantes respuestas de Don Georg.
Todo lo contrario de la manifiesta destemplanza del meso-americano mega-prelado de Tegucigalpa, el (según algunos) vocero de PP Franciscus, que va derramando lisuras, como la flor de la canela: 'Francisco, que intenta construir de un modo nuevo la Iglesia, encuentra oposición en la Curia Vaticana' es el titular con el presentan algunos medios las declaraciones de Maradiaga (aquí en inglés / aquí en español).
Mis contertulios saben que en este actualísimo (y polémico) caso de los desórdenes familiares católicos mantengo criterios de reserva y circunspección, con propensión a la mitigación como tendencia para el caso particular y mantenimiento de la disciplina según la praxis moral-pastoral (previa sólida doctrina) tradicional. Por eso me resulta más chocante esta in-formalidad sesgada, esta manera (digamos transversal?) de tratar el caso y publicarlo. Si me explico.
El horizonte próximo de todo esto es, claro está, el Sínodo de la Familia. El más lontano, ¿chí lo sá?
¿Quién sabe a dónde apunta la intención de PP Franciscus cum sociis fatigarum eius?
+T.