El juanpablismo fomenta la 'juanpablomanía' (afición/afección desordenada por las cosas del beato JP2º) y también la 'juanpablolatría' (veneración excéntrica, desmesurada y desordenada del beato susodicho). El fenómeno con sus epifenómenos se alienta y promociona desde círculos de reconocida filiación juanpablista, así como por determinados entes de interés (no diré económicos, ni comerciales, ni nada de eso, porque son términos groseros que no me gusta usar).
El último 'juanpablazo' (i. e. exitazo promocional-comercial juanpablista) es este montaje escénico-dramático-musical que ya circula por Italia, una obra muy inspirada en las archi-publicitadas tendencias y aficiones del beato Wojtyla, tan escénico y dramático él mismo:
Por lo que se ve en el youtube, por el entusiasmo de chicos y chicas que hablan de su 'experiencia', la cosa va de lo que va, sin más profundidades. Lo paradójico es que a veces te encuentras con que los entusiastas del hit-parade juanpablista son de los mismos círculos que en los años 70 abominaban de la 'ópera rock' (perdón por el exabrupto) Jesucristo Superstar, siendo ahora lo de Wojtyla más de lo mismo de aquello, en formato incluso más avanzado, porque el tiempo no pasa en vano.
A mí me parece otro exceso más en torno al que decían y aclamaban 'magno-santosúbito', incluso me parece blasfemo el cartel italiano que anuncia el espectáculo, que parafrasea en su título el versículo del Evangelio "la Palabra se hizo carne" alterándola y deformándola en "la Parola si fa música / la palabra se hace música". Si esto mismo lo hubiera hecho un artista postmoderno, hubiéramos clamado ¡blasfemia, blasfemia!, pero como es un teatrillo rock sobre el beato magno JP2º, a los chicos neocons les parece estupendo y aplauden la ocurrencia y hasta sufrirán paroximos de entusiasmo wojtyliano, clímax de emoción magno-juanpablista, ataques de histeria escénico-papapolaco. Y cosas así.
Uno de los promotores, el director musical del engendro, Raffaelle Avallone, dice que:
"Hay que hablar a los jóvenes en el idioma que ellos comprenden. No se trata de cantar la misa en latín o con la guitarra como se hace en las iglesias".
Pero me temo que pronto se cantarán en las iglesias las cuchufletas rock del drama escénico juanpablista, con guitarritas, en la Misa. Me imagino, por ejemplo, a las chicas nenas-monjas de Lerma, con sus sayas de blue-jeans y sus pañoletas, tocando y cantando los números del músical rock. No sé cuándo se harán y se cantarán las primeras adaptaciones pseudo-litúrgicas (todo cabe en la neo-liturgia, como muy bien demostró el mismo magno-beato JP2º), pero pronto aparecerán.
¿Qué será lo siguiente? Cualquier cosa. Cualquier cosa de lo que ya hay, quiero decir, porque estos elementos de 'nuevangelización' copian lo que hay fuera, plagian los recursos del mundo con la ilusa intención de que lo que engancha a los jóvenes vale para evangelizar a los jóvenes, sin distinguir ni deslindar planos ni referencias, como si todo valiera para todo.
Algún día, alguno de estos avispados promotores neocons montará un parque temático Jmj's o crearan una Juanpablolandia, con atracciones espirituales y bono de conversión con extra-esperiencia espiritual y flipa en colores.
El dia menos pensado, ya lo verán Uds.
+T.