martes, 9 de agosto de 2011
Y Sevilla...
Sevilla - aparte la juventud que acuda - estará en la JMJ de Madrid con una extraordinaria representación: La imagen de la Stmª Virgen de Regla, de la antigua Hermandad de los Panaderos, en su paso de palio, tal y como sale por las calles de Sevilla en Semana Santa, la noche del Miércoles Santo, desde hace siglos. Su paso cerrará el gran Via-Crucis que se ha organizado para la tarde del Viernes 19 de Agosto en el madrileño Paseo de Recoletos, con pasos e imaginería pasionista de toda España. Una forma de solemnizar la JMJ, siendo quizá este Via-Crucis monumental el acto más llamativo de todos los que se celebrarán en el centro de Madrid.
Habrá 14 pasos con representación de los misterios-estaciones de la Pasión del Señor, procedentes de 12 ciudades españolas, todas ellas reconocidas por las solemnes celebraciones de Semana Santa, sus cofradías y su artística imaginería religiosa, piezas de museo en muchos casos. Vuelvo a decir que el montaje del magno Via-Crucis en Recoletos será digno de ver.
En Sevilla, sin embargo, la idea y primer plan de este Via-Crucis suscitó una viva polémica, muy provinciana (dirán algunos) pero apasionadamente sevillana, que agitó durante unas semanas el mundillo siempre activo y chispeante de nuestras Hermandades y Cofradias (instituciones que no sé lo que importan en el resto de España, pero que en Sevilla son parte principalísima de su estructura social, imposibles de ignorar).
Quizá eso fue lo más chocante para los cofrades sevillanos, que sin consulta previa se vieron ante una especie de hechos consumados: Con la excusa de que era para el Papa, se planteó oficiosamente a la Hermandad del Patrocinio que la imagen del Cachorro (Stmº Cristo de la Expiración) fuera al Via-Crucis de Agosto de la JMJ. Entonces, cuando aquello se supo, escribí un articulete sobre el caso, aquí en EX ORBE.
Con cierto desfogue (este blog, recuerden, ante todo y más que nada, es para mi personal expresión y desfogue (sin excluir ulteriores funciones y/o objetivos, of course)) arremetí contra el Yago ideador y promotor del evento, un estupendo gestor, no lo dudo, pero sin remota idea de cómo es y funciona Sevilla. Los hechos lo demostraron.
La cosa se complicó porque después de la negativa absoluta de la Hermandad del Patrocinio surgieron otros intermediarios en el asunto, queriendo arreglar la cosa, yendo con el mismo ofrecimiento a otra popular (y populosa) cofradía. Si ser el primero en decir no ya es fatigoso, poner a otros en el brete de ser los segundos que se nieguen es rozar quasi el colmo de la indiscreción, como sucedió. El segundo asalto se sufrió en la Hdad. de la Esperanza de Triana, aun con más conmoción intra-cofradiera porque la invitación se tramitó de forma quasi oficial, y la Hermandad tuvo que responder oficialmente que no.
¿Y por qué no? Pues porque en Sevilla las Imágenes que se veneran en las Hermandades y Cofradías son nuestras Veneradas Imágenes, no son un adorno, no son una pieza artística, no son un objeto museístico, no son un elemento de exposición. No se trasladan de sus capillas salvo cuando salen en procesión, con toda solemnidad. Rarísimas veces se exponen en actos ajenos a los cultos piadosos; y caso de ser expuestas temporalmente en salas de museo, lo son de una forma excepcional y con una formalidad quasi-litúrgica, asombrosa para los ajenos pero justamente razonada por los sevillanos que nunca olvidan lo que son y representan las Veneradas Imágenes de sus Sagrados Titulares.
Imágenes devocionales como El Cachorro no han salido nunca de Sevilla; incluso cuando han sido objeto de necesarias y graves restauraciones estas se han llevado a cabo en instalaciones anejas a sus capillas. Lo más que se alejan de sus templos cuando urge restaurarlas es el espacio que separa sus iglesias del antiguo Monasterio de la Cartuja, donde se ubica el IAPH (una de las instituciones mejor valoradas de entre todas las promovidas por la Junta de Andalucía).
Estas explicaciones sobran si se discute entre sevillanos. Pero estas mismas razones suenan peregrinas al oído de extraños. Lo grave es que los extraños sean personas con intereses y obligaciones en Sevilla y no se atengan a los criterios sevillanos ni se avengan a esas leyes no escritas, que suelen ser las más importantes de las leyes, generalmente.
Entre dimes y diretes eclesiástico-cofradieros que dan la razón al viejo dicho 'Ni fías ni porfías ni cuestión con cofradías', el asunto se fue convirtiendo en un molesto compromiso que había que arreglar para que no se enconara y derivara en peores malentendidos y desencuentros. La solución llegó no por vía directa sino por medios, digamos, transversales, con agentes móviles-flexibles, contactos pre-tanteados y alternativas abiertas-positivas. Así sí se cierran tratos. Por decreto y/o baculazo, imposible.
El final de este episodio netamente sevillano se disfrutará, Deo volente, el Viernes de la JMJ, con la bellísima Virgen de Regla luciendo en su deslumbrante paso de palio por Recoletos y aledaños de la capital, en honor del Papa Benedicto y para honor de la JMJ.
En los próximos dias se hará el traslado de la imagen de la Virgen; el paso ya está en Madrid, y hasta se han permitido los costaleros un breve ensayo en la Puerta del Sol. En cuanto llegue, la imagen de la Stmª Virgen de Regla quedará expuesta en su paso y se celebrará un Triduo en su honor. La procesión de ida y vuelta al Via-Crucis será también, parece ser, more sevillano, hasta con el Sr. Alcalde en la presidencia, con vara. Si la gente de la Hermandad de los Panaderos se moviliza como es de esperar, el 19 de Agosto será, por unas horas, Miércoles Santo en Madrid y el Paseo de Recoletos se transmutará en un pedazo de la calle Orfila esquina con Javier Lasso de la Vega, un rompimiento de gloria que pintaría admirado y admirable el gran Claudio Coello.
Esto será lo que verá Madrid, y desde Madrid todo el mundo:
Por supuesto, nada que ver con otras 'celebraciones' de la JMJ en formato 'juanpablista'. Esto, lo del Via-Crucis con los Misterios de la Semana Santa de España y el paso de palio de la Virgen de Regla, será otra cosa, otra JMJ, una JMJ made in Spain, España profunda, con sus ancestrales señas de identidad católica, tan ricas y elocuentes. Y tan vivas.
Lo del Cristo de Mena de Málaga con la escolta de la Legión y su salida a hombros desde la Catedral Castrense, también va ser digno de ver. En el Madrid de los días del hundimiento de Zp, su laicismo y su pseudo-memoria histórica, ver al Crucificado exaltado por las más legendarias tropas del Ejército Español será todo un símbolo, un clamor de la España real contra la impostación de la infra-nación proyectada por el peor gobierno que se ha sufrido en el país desde la impía y criminal 2ª Republica-ca.
Entenderán ustedes que, sin apearme de una sóla de las críticas hechas a la JMJ juanpablista, conviene apreciar detalles y hacer justicia a lo que está bien. Y esto, Dios mediante, estará muy bien.
+T.